Si vas a Trujillo, no lo dudes: Posada Dos Orillas
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Incidencias
Si hay algún problema, no dudes en decírnoslo:
Acerca de:Posada Dos Orillas [Trujillo]
Ventajas:Limpieza, decoración, comida y situación
Desventajas:Aparcamiento
Hace aproximadamente mas de un año que me alojé en la Posada Dos Orillas en un viaje que realicé por Trujillo, Valencia de Alcántara, unos pueblecitos de Portugual como Castelo de Vide y que finalizacé en la Sierra de Gata.
Tuve la ocasión de alojarme con mi pareja en la suite Trujillo de Extremadura, la mas grande de Posada Dos Orillas. Respecto a su habitación puedo decir que el tamaño era considerable, la limpieza impecable y el mobiliario estaba colocado con mucho gusto, siendo lo que mas me gustó los juegos de luces indirectas que había en la habitación. La cama era muy cómoda, además tenía dosel. Respecto a las vistas, tenía unas vistas espectaculares desde una ventana que daba a la torre de Santa María la Mayor que por las tardes se teñía de tonos anaranjados.
Los baños estaban muy limpios y perfumados, además, el jabón olía de maravilla y en la habitación había incienso que podías prender para perfumar la habitación. Se notaba que todo estaba muy nuevo.
La apariencia de la Posada Dos Orillas y la decoración antigua le va muy bien a este alojamiento que está lleno de detalles antiguos. El ambiente en la recepción fue muy bueno, muy amables y atentos, incluso nos ofrecieron tomar prestada una guía de la ciudad para que no se nos pasase nada a la hora de visitar y disfrutar de Trujillo. Además, hace poco hasta me mandaron una carta para agradecernos nuestro alojamiento y la verdad es que lo recuerdo con mucho agrado.
El precio no nos pareció nada caro, en torno a los 50 euros. En la relación calidad precio dudo de que en Trujillo puedas encontrar nada parecido.
Además, pudimos disfrutar de una tranquila velada en el restaurante, acompañada por la música de Bebo&Cigala. El menú que ofrecían a un precio económico no era muy amplio porque no ofrecía mucha Variedad de comidas pero he de decir que los platos estaban exquisitos entre los que había unas ensaladas y filetes de carne con unas salsas deliciosas. La calidad de la presentación también nos encantó. Además el servicio fue muy atento y amable y el ambiente era tranquilo y sosegado porque en la sala del restaurante estábamos solo dos parejas. Además, había una terraza con mucho encanto en un patio interior preciosa pero que no pudimos disfrutar.
Su localización es inmejorable, muy cerquita de los principales monumentos de la ciudad, junto a la Plaza Mayor de la localidad desde donde recomiendo comenzar una visita a la ciudad y donde aconsejo contratar una visita guiada que cubre la mayoría de los monumentos mas destacables de Trujillo por un precio económico. Además, es un lugar tranquilo en el que apenas escucharás ruidos por la noche.
El único detalle que nos incomodó fue que no disponía de aparcamiento y dejamos el coche justo en la puerta, muy pegado en la pared pero que estuvo cuidado ya que estaba junto a la entrada del hotel.
Si me preguntasen por un alojamiento para dormir en Trujillo no lo dudaría y recomendaría Posada Dos Orillas. Espero volver pronto porque tanto el hotel como la ciudad me encantaron.
Tuve la ocasión de alojarme con mi pareja en la suite Trujillo de Extremadura, la mas grande de Posada Dos Orillas. Respecto a su habitación puedo decir que el tamaño era considerable, la limpieza impecable y el mobiliario estaba colocado con mucho gusto, siendo lo que mas me gustó los juegos de luces indirectas que había en la habitación. La cama era muy cómoda, además tenía dosel. Respecto a las vistas, tenía unas vistas espectaculares desde una ventana que daba a la torre de Santa María la Mayor que por las tardes se teñía de tonos anaranjados.
Los baños estaban muy limpios y perfumados, además, el jabón olía de maravilla y en la habitación había incienso que podías prender para perfumar la habitación. Se notaba que todo estaba muy nuevo.
La apariencia de la Posada Dos Orillas y la decoración antigua le va muy bien a este alojamiento que está lleno de detalles antiguos. El ambiente en la recepción fue muy bueno, muy amables y atentos, incluso nos ofrecieron tomar prestada una guía de la ciudad para que no se nos pasase nada a la hora de visitar y disfrutar de Trujillo. Además, hace poco hasta me mandaron una carta para agradecernos nuestro alojamiento y la verdad es que lo recuerdo con mucho agrado.
El precio no nos pareció nada caro, en torno a los 50 euros. En la relación calidad precio dudo de que en Trujillo puedas encontrar nada parecido.
Además, pudimos disfrutar de una tranquila velada en el restaurante, acompañada por la música de Bebo&Cigala. El menú que ofrecían a un precio económico no era muy amplio porque no ofrecía mucha Variedad de comidas pero he de decir que los platos estaban exquisitos entre los que había unas ensaladas y filetes de carne con unas salsas deliciosas. La calidad de la presentación también nos encantó. Además el servicio fue muy atento y amable y el ambiente era tranquilo y sosegado porque en la sala del restaurante estábamos solo dos parejas. Además, había una terraza con mucho encanto en un patio interior preciosa pero que no pudimos disfrutar.
Su localización es inmejorable, muy cerquita de los principales monumentos de la ciudad, junto a la Plaza Mayor de la localidad desde donde recomiendo comenzar una visita a la ciudad y donde aconsejo contratar una visita guiada que cubre la mayoría de los monumentos mas destacables de Trujillo por un precio económico. Además, es un lugar tranquilo en el que apenas escucharás ruidos por la noche.
El único detalle que nos incomodó fue que no disponía de aparcamiento y dejamos el coche justo en la puerta, muy pegado en la pared pero que estuvo cuidado ya que estaba junto a la entrada del hotel.
Si me preguntasen por un alojamiento para dormir en Trujillo no lo dudaría y recomendaría Posada Dos Orillas. Espero volver pronto porque tanto el hotel como la ciudad me encantaron.
Fecha:09:53:21 26/01/10
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Votos:no disponible.
Categorías:Viajes
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