Lo peor sin ningún genero de duda de este producto lácteo de la marca blanca de los supermercados Dia%, es su presentación, que me parece poco acertada, rancia y nada original, con lo que la capacidad de atraer al público se ve bastante disminuida. Bajo mi criterio es incómodo de ver.
Otra cosa es cuando el cliente, en este caso un servidor, le quita la tapa que cierra al cochambroso envase que recuerda al de un yogurt de los baratos, aunque sin la capacidad de dañar a la vista; es precisamente en ese instante cuando nos encontramos ante una cuajada de buena calidad, perfecta consistencia y mejor sabor, que acompañada con rica miel, azúcar o incluso edulcorante líquido para aquellos que estén a dieta, hará las delicias de sus paladares.
La cuajada del envase cutre y bonito de cara a la pared, además de su buen sabor y vista de la sustancia, nos ofrece a modo de compensación por su mala imagen en la estantería, un precio realmente barato, quizás el más económico de todas las cuajadas que podemos encontrar en el mercado, con lo que obtiene la total absolución y beneplácito del público.