A mi marido le gusta mucho el Marqués de Cáceres Gran Reserva 2005 para acompañar las carnes, sobre todo las carnes de caza que a él le gustan tanto y que yo detesto. Nunca se las dejo hacer en casa. Tiene que ir a la casa de su madre a preparar esas liebres y demás bichos que caza mi suegro. Yo soy anticaza.
El vino es sabroso. Tiene un toque bastante afrutado que imaginas con sólo ver su color rojizo. Me recuerda mucho en su sabor al de los frutos del bosque, a las cerezas. También le noto un toque a vainilla. En la boca lo notas fresco. Mi marido dice que sabe a vino Rioja. Tiene que saber porque es lo que es: un Rioja.
Lo suelo servir con cordero o con carnes asadas en mi casa. Mi suegra, como os he dicho, lo pone para acompañar las carnes de caza. Es un vino que gusta mucho a las visitas. Como dice mi cuñada, es totalmente chic, elegante, viste una mesa.
Os lo recomiendo. El Marqués de Cáceres Gran Reserva 2005 es un vino con personalidad. Tiene un sabor intenso que te queda en la boca hasta que lavas los dientes con un buen dentífrico.
Se le nota que ha sido elaborado con una buenas uvas. Dice mi marido que es un vino que crían durante 26 largos meses en barricas de roble francesas y después lo pasan a botellas donde lo tiene unos tres años. Se le nota tanto cuidado en su sabor fresco y afrutado inconfundible. Cuando tomas una copa no lo olvidas.
La desventaja es su precio. Cuesta cada botella unos 15 euros. Este vino elaborado en un 85% con uva tempranilla no se puede servir todos los días. Hay que guardarlo para ocasiones especiales.