Invisibobble es una goma para el pelo muy curiosa. Fabricada en plástico de colores, tiene forma de cable de teléfono vintage y, en la web de la marca, se dice que también puede usarse como pulsera.
Su precio no es barato, pero me hice con ellas atraída por su promesa de no apretar, dañar ni cortar el pelo en absoluto.
Mis impresiones
Su uso como pulsera no me convence en absoluto. Tal vez, para las niñas más jovencitas...
Uno de sus puntos fuertes en comparación con las gomas y coleteros habituales es que se puede lavar con agua y jabón y queda perfecta, no pierde color ni se pone fea con el uso a corto plazo, como sucede con accesorios similares.
Además, no se escurre aunque el pelo esté recién lavado. Tampoco se afloja ni da tirones al quitarla y, sobre todo, no me deja marca en el pelo, ni se me quedan pelos enredados en ella.
Definitivamente la recomiendo para el verano sobre todo, que es cuando yo le doy uso principalmente, ya que en la playa y en la piscina siempre me hago una coleta. También me parece superpráctico a la hora de maquillarme. Aunque tenga el pelo aún mojado, no dudo en recogerlo con el Invisibobble, porque sé con certeza que no me deja la típica "onda" de haberlo recogido para apartar el pelo de la cara.
Lo peor evidentemente, es su precio. Cada caja, que contiene 3 unidades, cuesta 4,95€ en Maquillalia. Por ponerle algún pero más, me gustaría que en cada caja viniesen colores surtidos ya que, para tener blanco y negro (los colores que quería), tuve que comprar dos cajas.