La Lush Reconfortante es una burbuja de baño de 200 gramos que te de para varias veces. Yo la corto en seis trozos y así la puedo utilizar hasta seis veces.
Al principio no me hacía mucha gracia pese a que yo enseguida me apunto a los nuevos productos. Eso de cortar la burbuja en trocitos y repartirlos por la bañera para que mi baño relajante fuera más relajante al volverse el agua color fresa me daba un poco de repelús, más que nada por el color. La burbuja cambia el color del agua y hace espuma. Yo le aplico encima el chorro de agua de la ducha para que haga todavía más espuma. Me encantan los baños con mucha espuma.
No me sale cara porque la divido en seis trozos y esos trozos en trocitos para cada baño relajante. Si la utilizar entera en sus 200 gramos, me saldría carísima. Cuesta 6,95 euros. Mucho dinero para un solo baño.
La única ventaja que le encuentro es lo relajante que hace el baño por la mucha espuma que hace. el color, como os he dicho, no me acaba de gustar. Tampoco noto que me deje la piel muy hidratada. Su espuma no implica mayor hidratación.
Os la recomiendo por lo novedoso del producto. Es un producto que vale la pena probar. No le gusta a todo el mundo, por supuesto. Mi chico se metió un día conmigo en la bañera cuando había puesto un buen trozo de burbuja y salió horrorizado. También le echaba para atrás el color que le pone al agua. Si fuera un color verde o azul, esta burbuja ganaría mucho.