Este fue uno de los primeros juegos con el que jugué a la play. No se si es por nostalgia o porque el juego es bueno, pero lo cierto es que me sigue gustando. Realmente me encanta y me sirve para descargar adrenalina.
Tekken 3 (y todos los tekken que hay) es un juego de lucha, de machacar al contrario a patadas y a puñetazos para ir restándole vida y conseguir vencerlo. Hay varios modos de juego pero el que más me gusta es el survival, en el que tu personaje va por la calle y le salen “malotes” a los que hay que atizar para poder seguir avanzando. Al final de cada fase hay un súper malo que cuesta mucho mas vencer que a los malotes que te encuentras por ahí. Una vez vencido, cambias de escenario pero el juego es exactamente igual. No he conseguido pasarme de la pantalla 3, aunque tampoco es que juegue demasiado.
Es una pena que no se pueda jugar en este modo dos personas, sería más divertido.
Para dos sólo existe el enfrentamiento directo, ya se individual o en torneo. Cada jugador elige un número de personajes y éstos se van enfrentando entre ellos. Cada personaje tiene una cualidad diferente y sus trucos, que vienen detallados en el libro de instrucciones, pero yo me limito a pulsar las teclas como si me fuera la vida en ello. De ahí que diga que me sirve para descargar adrenalina.
Tekken 3 tiene un montón de años. Comparado con lo que hay ahora, os podéis imaginar que parece del siglo pasado (y creo que lo es, jeje) pero a mí me sigue gustando precisamente por lo simple. No falla y no cansa la vista con esos escenarios tan elaborados. Me recuerda mucho a las maquinitas de mi época, jeje.