El Hotel Sheraton de Boston esá en la zona de Back Bay, una zona de tiendas y restaurantes donde puedes fundir la Visa sin darte cuenta.
Nada más entrar, encuentras la recepción. Muchos sillones para esperar tu turno y unos empeleados muy amables. Enseguida te das cuenta que estás en un hotel frecuentado pro gente de negocios. Al lado tiene un centro de convenciones, al que puedes acceder desde el mismo hotel por una pasarela.
Mi habitación estaba en el piso 22. Casi nada. Me gustaron las vistas, pero no el tamaño de m cuarto. Era demasiado pequeño. el espacio estaba tan bien aprovechado que hasta habían puesto una puerta corredera para el cuarto de baño. Así ganaban algo de espacio. Tuvieron el detalle de dejarme un café y un té preparados sobre una pequeña mesa que había en una esquina.
Lo mejor de mi habitación era la cama. Era muy cómoda, tanto que daban ganas de comprársela para llevártela a casa.
Dentro del armario me llamó la atención la tabla de planchar que encontré junto con una plancha. Allí pensaban en todo.
El cuarto de baño también era pequeño. Lo que tenía grande era el espejo. Los champús y geles me los dejaron tasados. Lo mismo puedo decir de las toallas. Sólo me dejaron una.
Me decepcionó que el wi fi no fuera gratuito en la habitación. Te podías conectar gratis en recepción, pero era un lío por la concurrencia de gente que había.
Del desayuno y comidas no puedo decir nada porque comí fuera.