El cepillo dental Braun ORAL-B PC 500 es uno de los muchos cepillos eléctricos que he probado en mi afán de conseguirme a ellos. Todavía no lo he conseguido.
Lo compré porque Oral-B es una marca que me convence. Utilizó la seda dental de esta marca y estoy muy contenta con ella.
El cepillo es similar a otros cepillos eléctricos de la competencia. El cabezal se le mueve de manera circular, lo que ayuda a mejorar la limpieza de los dientes. No es un cepillo que notes pesado. Yo casi no noto diferencia en cuanto a peso con los cepillos normales.
Funciona con batería. Cargar dicha batería lleva su tiempo. Horas y horas lo he tenido cargando.
Me gusta su diseño. Tiene el mango de color naranja. También lo vendían con el mango verde, azul, blanco, etc. Para gustos había colores. En el mango va el botón de encendido y apagado, que es de goma a juego con el color del cepillo. A mí el mango se me queda corto a la hora de cepillar las piezas dentales de atrás.
No es barato. Me costó 39,95 euros. ¿Compensa comprarlo? Depende. Si te habitúas a él, consigues una limpieza más a fondo de tu dentadura, lo cual es una gran ventaja respecto a los cepillos normales.
Con este cepillo no hace falta hacer presión. Es más, si lo presionas, se te detiene.