Arnidol es una barrita que puede recordar a un pegamento o a una barra de labios. Está compuesto por árnica y harpagofito, dos componentes que ayudan a aliviar el dolor y evitar la inflamación. Se vende en farmacias y estoy casi segura de que todas las familias con niños ya lo conocen.
Arnidol es súper cómodo y muy fácil de usar. Nosotros también empezamos a comprarlo por los niños, pero vale para todo el mundo, y es igual de efectivo. Lo mejor es aplicarlo lo antes posible, después del golpe, así se reduce la inflamación y sólo salen moretones si el golpe es realmente fuerte, la mayoría de las veces no deja señales. Además tiene un componente analgésico, por lo que ayuda con el dolor.
Es muy fácil de usar, solo hay que frotar la barrita en la zona a tratar y punto, no pica ni duele ni escuece, y no tiene casi olor. Hay que tener en cuentas que es sólo para golpes, no para heridas abiertas. Se puede encontrar en cualquier farmacia, y dura bastante. El precio ronda los 6 euros.
Si tienes niños en casa es un producto imprescindible, lo agradecerán un montón, en seguida te pedirán que se lo pongas cuando se hacen daño.