Nunca es demasiado pronto para empezar a mimar la piel del cuerpo. Hay que ponerse muchas cremas. Así evitarás tener la piel flácida.
Yo me estoy poniendo bastante la Clarins Lift Fermeté, una crema carísima que no me cunde demasiado. Es de color rosa y se extiende bastante bien gracias a una textura intermedia.
La desventaja de la Clarins Lift Fermeté es su precio. Me costó el envase de 200 ml 48,50 euros. Es como para pensarlo dos veces antes de comprarla.
Esta crema me deja la piel flexible, tersa, suave al tacto, bien hidratada. Sólo me la estoy aplicando en brazos y piernas porque es muy cara. Si tuviera un precio más razonable, me la aplicaría por todo el cuerpo. Es fantástica en cuanto a resultados. A los dos o tres días ya notas sus efectos positivos en tu piel.
Es una crema muy recomendable para mujeres con celulitis. Yo no es que tenga mucha, pero alguna siempre aparece. No es que haga milagros. Aun así es mucho mejor que otras cremas de la competencia que te venden también para combatir la flacidez de piernas y brazos.
Me gusta mucho la sensación de frescor que me deja. Mi piel pronto la absorbe aunque sea generosa con las cantidades que me aplico.
El envase la conserva bien. Quitas la tapa de rosca blanca y tiene otra protección interior. Es un envase de plástico de color blanco. Me gusta. No importa que caiga al suelo porque no rompe.