Se trata de una comedia española tan divertida como extremadamente disparatada, cuyo argumento se centra en una despedida de solteros y los avatares que los protagonistas de la misma sufren como consecuencia de una noche disparatada y plagada de excesos.
La película no pasará a la historia del séptimo arte ni por sus actuaciones, dirección, guión, ni tan siquiera por sus efectos especiales, aunque tiene un puntito canalla, irreverente y chabacano que finalmente termina por divertir y entretener al espectador.
No obstante, no puedo recomendar la adquisición de su DVD, salvo que lo encontréis en una de esas ofertas típicas de la prensa dominical, pues aunque recomiendo su visionado, la verdad es que una vez vista tampoco merece la pena que ocupe un lugar en nuestra videoteca que puede ser empleado para un título mejor.
Sin embargo, si finalmente te inclinas por adquirirla, la podrás conseguir por poco menos de diez euros.