Películas más o menos recientes como Héroe, La maldición de la Flor Dorada o La casa de las dagas voladoras, habían otorgado al cine de artes marciales una especie de “dignidad” dramática, e incluso estética, que le dio al género un prestigio del que antes carecía.
Pues bien… Cualquier similitud entre El reino prohibido y alguna de las películas citadas es pura coincidencia.
Este film supone la vuelta a los guiones fáciles, las peleas muy coreografiadas e imaginativas y el entretenimiento puro y duro.
SINOPSIS.
Jason (Michael Angarano), es un forofo de las artes marciales que acude a locales de Chinatown en busca de material que alimente su adicción. Un día, encuentra el Cayado del Rey Mono y repentinamente se traslada a la mítica China medieval, donde deberá devolver la vara a su dueño.
Le prestará su ayuda un grupo muy heterogéneo formado por el Inmortal Borracho (Jackie Chan), el Monje Silencioso (Jet Li) y Gorrión Dorado (Yifei Liu)…
MI OPINIÓN PERSONAL.
Es una película dirigida a quienes les guste ver a gente dándose leña. Todo un homenaje al cine de Bruce Lee y a los fanáticos de los combates sin complicaciones trascendentales.
Jet Li y Jackie Chan se unen por primera vez para repartir mamporros, y se ve a la legua que eso les divierte.
El resultado es fresco, familiar y muy, muy previsible, pero que consigue ser entretenida en todo momento.
Sin embargo, es un poco “elemental”, y muy fantasiosa, aunque está plagada de momentos muy divertidos, en los que se unen las originales coreografías de Jackie Chan y la espectacularidad de Jet Li.
Ah! Y una última cosa: Si tenéis menos de diez años, fliparéis.