De aquellos barros vienen estos lodos, y como poseemos Wii Sport y nos gustó, decidimos que esta nueva entrega seguramente mejoraría a su predecesora, en lo que os puedo asegurar que no nos equivocamos.
Pero empecemos por lo malo de este juego, sin Wii Motion Plus ni lo intentes, no es posible jugar sin este accesorio para nuestra Wii, por lo que supone un gasto extra.
Otra cosa que puede ser considerada por algunos de forma negativa, no por mi, aunque se quién se queja de ello, es que tampoco se puede jugar en modo online.
Las virtudes de este juego en comparación con su predecesor son bastantes, puesto que en lugar de cinco juegos nos ofrece doce y con unos gráficos algo mejorados.
De entre estos doce juegos sólo repite bolos y golf de los que traía Wii Sport, pero en el que se notan los retoques en el aspecto gráfico para mejor, como he dicho. Las novedades son la esgrima con tres modos de juego, platillo volador, pin pon, moto de agua, piragua, ciclismo, baloncesto con las modalidades de triples y partido, deportes aéreos con los modos paracaidismo, combate aéreo y turismo, esquí acuático acrobático y tiro con arco. No echarme mucha cuenta con los nombres que no lo tengo delante y además yo los bautizo como me da la gana, que el platillo y el esqui tienen un nombrecito en guiri que se las trae.
De todos los que más me gustan son los bolos, el combate aéreo y cualquiera de las modalidades de baloncesto, mientras que apenas toco el platillo y el ciclismo.
Por lo demás nos ofrece lo mismo que su predecesor pero en más cantidad y calidad, juego familiar, competición y diversión a raudales.
A nosotros nos costó en Game hace unos meses casi 50 euros, por lo que se trata de un juego caro, defecto que suele ser habitual en todos los videojuegos de esta plataforma.
Es un juego que como el anterior, lo recomiendo encarecidamente para niños, aunque partiendo de la base que prefiero que jueguen al aire libre, pero que teniendo en cuenta mi adversión sobre las relaciones autistas entre las videoconsolas y los niños, puedo afirmar sin temor a equivocarme, que se trata de un juego muy coral que necesita de compañía para su disfrute, bajo mi criterio cuanto más compañía mejor, con la consiguiente interactuación entre humanos mediante la maquina y sin ella.