El mes pasado estuvimos alojados unos días en este hotel, y la experiencia fue bastante buena. El establecimiento en sí está situado en una calle muy céntrica de la ciudad y además ha sido renovado hace poco así que tiene aspecto bastante moderno, ya que todo está prácticamente nuevo. A nosotros nos tocó una habitación de la que no tuvimos ninguna queja, exceptuando el hecho de que la ventana daba a un patio de luces, aunque esto fue algo poco importante.
El hotel tiene internet Wifi, y en la recepción hay unos sofás muy cómodos y un ordenador que puede ser usado con total libertad. En lo que respecta al desayuno estaba bastante bien, y consistía más o menos en lo que puede esperarse en cualquier hotel: leche, tostadas, zumos, café...
La atención al cliente por parte de las recepcionistas dependía del horario, ya que la que nos atendió nada más llegar no nos explicó demasiado bien lo que teníamos que hacer, aunque por el día la que estaba ya era más eficaz en su trabajo, más simpática y que cualquier cosa que necesitábamos siempre nos ayudaba. El parking del hotel es bastante caro, 16 euros al día, y la verdad es que por este precio no se puede explicar el hecho de que no tenga ascensor siendo dos pisos.
Al margen de estos "pequeños" detalles, el hotel es bastante bueno y el precio (salvo el parking) razonable.