Bolitas de Milka con sorpresa.
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Si hay algún problema, no dudes en decírnoslo:
Acerca de:Milka Lila Stars Snax
Ventajas:El sabor. Textura de bombón.
Desventajas:El autocierre. No lo encuentro en el supermercado.
CÓMO CONOCÍ EL PRODUCTO o abierta a nuevas sensaciones.
Gracias a la web de márqueting participativo trnd he podido participar en una campaña para conocer este nuevo producto. En casa solemos consumir mucho chocolate Milka, por lo que la portunidad de probar un snak hecho con ese chocolate no parecía mala idea.
MILKA LILA STARS SNAX o el nombre impronunciable.
Con ese nombre... a ver cómo me apaño para pedirlo en la tienda o recomendarlo a nadie ¡se necesita anotarlo, y yo recordarlo!
Lo de Milka es fácil, es una marca muy conocida. Un 10 por lo obvio.
Lo de lila... será por el color corporativo de la marca, porque el chocolate lila aún está lejos de nuestros supermercados. Un cero por innecesario (ya vemos el color de la bolsa Milka) y por inapropiado (¿me quieren atraer vendiéndome un chocolate lila y que al abrir la bolsa no vea más que color chocolate?)
Lo de stars.... nada se asemeja a una estrella, será una muy poco brillante (brillante como una estrella apagada) idea de alguien. Un cero estrellado.
Lo de Snax... es el nombre de la gama dentro de Milka (tabletas, snax...). Pero no, que hubieran puesto snack, que yo lo entiendo mejor. Un cinco, por el juego de palabras.
EL CHOCOLATE o bolitas con sorpresa.
El produto en sí es una avellana entera, recubierta con cereales triturados y caramelizados. ¿Y el chocolate? Ah, es que he empezado por la sorpresa. Todo esto viene recubierto por chocolate Milka, en forma de una bolita. Es más como un bombón que como un conguito, para dejar claro el tamaño.
Visto esto, ya sabemos que contiene leche, frutos secos (avellana) y cereales (trigo, arroz, soja... y gluten): lo habitual a avisar para los alérgicos. La lectura exacta de los elementos, lo dejo para curiosos con estómago. Y para los alérgicos al aumento de peso, comentar que sí, engorda un montón: por cien gramos de producto tendremos 555 kcal, 7,6 gramos de proteina, 50,5 gramos de hidratos de carbono y 35,5 gramos de grasa. Para hacernos una idea, como cien gramos de nocilla.
Retomando lo de la bolita, y más cuando tiene un fruto seco entero dentro, sí considero que no debe ser dado a niños pequeños por el riesgo de atragantamiento. Y siendo un dulce... ¿no podrían poner la avellana triturada? Saber sabría igual, pero al menos no tendríamos que tener en mente la maniobra Heimlich cada vez que el chaval (o menos chaval, que los accidentes pasan) meta la mano en el paquete.
EL ENVASE o la ciencia de la pinza.
El envase es una bolsita de color lila corporativo Milka, con vaca y todo. El material es el mismo (o un poco más flexible, pero muy parecido) al de las tabletas Milka.
La apertura es bastante fácil: rasgas la parte superior y listo. Y este sí que es abrefácil.
El contenido es de 170 gramos, suficiente.
Si nos agobiamos por los datos nutricionales que he comentado antes, tranquilos: Milka ha pensado en todo y a decidido ofrecernos junto con la compra de su producto un pack de autocierre (tachán).
Si buscamos bien (y yo tardé en encontrarlo, dándole vueltas y vueltas... hasta que desistimos y apareció en una segunda revisión: “pero si tiene que estar!”) encontraremos una pegatina blanca pegada al paquete. Incluye instrucciones (yupi). Véase: abra la bolsa, coma (eso no lo dice, pero si no... ¿para qué la abres, para contar las bolitas?), pliegue la bolsa y use la pegatina como cierre. Así, al puro estilo fixo.
La idea del autocierre fue buena para sus tabletas pero... ¡la pegatina no dura nada de nada! Es más, con la bolsita a medias, despegué la pegatina, doblé y pegué. Todo bien hasta el sustazo que me dio cuando no sólo se despegó sino que la pegatina salió volando. Resistencia de pegado... nula. ¿Y para eso me volví loca buscando la pegatina? Conclusión: busquemos una pinza.
LA PRUEBA o lo que importa.
El chocolate de la bolita es suave, se disuelve con facilidad en la boca y nos deja masticar el interior. De todas maneras, si somos más avidos, se puede morder la bolita sin esperar: no es más dura que una onza de chocolate. Eso sí, ¡cuidado con la sorpresa de dentro!
El cereal aporta un tono crujiente muy interesante, pero la avellana hay que masticarla sí o sí. La verdad es que no soy muy fan de las avellanas, me parecen muy sosas y prefiero siempre como alternativa la avellana o el cacahuete. Pero en este caso, al mezclarse con el cereal pues se nota menos sosa.
También hay veces que he encontrado los frutos secos del chocolate demasiado “petrificados”, pero en este caso están en su punto: ni reblandecidos ni pétreos.
Una ventaja sobre el formato en tableta es que podemos ponerlo como aperitivo o dulce para acompañar un café sin desistir de la estética: parecen bombones redondos.
Además, es más apetitoso y manejable para compartir.
En cuanto al punto clave... sí, engorda. Pero tampoco hay que tomarse el paquete de una sentada, ¿no?
DETALLES TÉCNICOS o dónde y cuánto.
Al participar en el proyecto de trnd me facilitaron probar una bolsita de este producto, con un vale para una futura compra. Pero el caso es que ya he buscado por cinco supermercados diferentes (y de los nacionales, no creais)... y nada. Estoy ojo avizor para cuando aparezcan por las estanterías. Hay rumores de que en Alcampo lo podemos encontrar, pero no lo he podido comprobar porque me queda bastante lejos de casa.
Sobre el precio, sólo puedo decir el precio orientativo que facilita la empresa: 1,99 euros por 170 gramos de producto. Si es así, no está mal.
CONCLUSIÓN o si llenar la cesta.
El producto en sí está bueno, es un dulce bastante aceptable: me gustó el sabor, la textura y su aspecto.
El envase está bien, con un 10 a la apertura y un cero al autocierre.
En cuanto a la distibución, me abstengo de poner nota porque lo estoy achacando a que es un producto muy nuevo y habrá que darle un margen. Pero ya me estoy cansando de esperar, la verdad.
En cuanto al precio, correcto... pero sin confirmar.
Conclusión: si lo encontrase por fin en el supermercado, sí lo compraría de vez en cuando.
Gracias a la web de márqueting participativo trnd he podido participar en una campaña para conocer este nuevo producto. En casa solemos consumir mucho chocolate Milka, por lo que la portunidad de probar un snak hecho con ese chocolate no parecía mala idea.
MILKA LILA STARS SNAX o el nombre impronunciable.
Con ese nombre... a ver cómo me apaño para pedirlo en la tienda o recomendarlo a nadie ¡se necesita anotarlo, y yo recordarlo!
Lo de Milka es fácil, es una marca muy conocida. Un 10 por lo obvio.
Lo de lila... será por el color corporativo de la marca, porque el chocolate lila aún está lejos de nuestros supermercados. Un cero por innecesario (ya vemos el color de la bolsa Milka) y por inapropiado (¿me quieren atraer vendiéndome un chocolate lila y que al abrir la bolsa no vea más que color chocolate?)
Lo de stars.... nada se asemeja a una estrella, será una muy poco brillante (brillante como una estrella apagada) idea de alguien. Un cero estrellado.
Lo de Snax... es el nombre de la gama dentro de Milka (tabletas, snax...). Pero no, que hubieran puesto snack, que yo lo entiendo mejor. Un cinco, por el juego de palabras.
EL CHOCOLATE o bolitas con sorpresa.
El produto en sí es una avellana entera, recubierta con cereales triturados y caramelizados. ¿Y el chocolate? Ah, es que he empezado por la sorpresa. Todo esto viene recubierto por chocolate Milka, en forma de una bolita. Es más como un bombón que como un conguito, para dejar claro el tamaño.
Visto esto, ya sabemos que contiene leche, frutos secos (avellana) y cereales (trigo, arroz, soja... y gluten): lo habitual a avisar para los alérgicos. La lectura exacta de los elementos, lo dejo para curiosos con estómago. Y para los alérgicos al aumento de peso, comentar que sí, engorda un montón: por cien gramos de producto tendremos 555 kcal, 7,6 gramos de proteina, 50,5 gramos de hidratos de carbono y 35,5 gramos de grasa. Para hacernos una idea, como cien gramos de nocilla.
Retomando lo de la bolita, y más cuando tiene un fruto seco entero dentro, sí considero que no debe ser dado a niños pequeños por el riesgo de atragantamiento. Y siendo un dulce... ¿no podrían poner la avellana triturada? Saber sabría igual, pero al menos no tendríamos que tener en mente la maniobra Heimlich cada vez que el chaval (o menos chaval, que los accidentes pasan) meta la mano en el paquete.
EL ENVASE o la ciencia de la pinza.
El envase es una bolsita de color lila corporativo Milka, con vaca y todo. El material es el mismo (o un poco más flexible, pero muy parecido) al de las tabletas Milka.
La apertura es bastante fácil: rasgas la parte superior y listo. Y este sí que es abrefácil.
El contenido es de 170 gramos, suficiente.
Si nos agobiamos por los datos nutricionales que he comentado antes, tranquilos: Milka ha pensado en todo y a decidido ofrecernos junto con la compra de su producto un pack de autocierre (tachán).
Si buscamos bien (y yo tardé en encontrarlo, dándole vueltas y vueltas... hasta que desistimos y apareció en una segunda revisión: “pero si tiene que estar!”) encontraremos una pegatina blanca pegada al paquete. Incluye instrucciones (yupi). Véase: abra la bolsa, coma (eso no lo dice, pero si no... ¿para qué la abres, para contar las bolitas?), pliegue la bolsa y use la pegatina como cierre. Así, al puro estilo fixo.
La idea del autocierre fue buena para sus tabletas pero... ¡la pegatina no dura nada de nada! Es más, con la bolsita a medias, despegué la pegatina, doblé y pegué. Todo bien hasta el sustazo que me dio cuando no sólo se despegó sino que la pegatina salió volando. Resistencia de pegado... nula. ¿Y para eso me volví loca buscando la pegatina? Conclusión: busquemos una pinza.
LA PRUEBA o lo que importa.
El chocolate de la bolita es suave, se disuelve con facilidad en la boca y nos deja masticar el interior. De todas maneras, si somos más avidos, se puede morder la bolita sin esperar: no es más dura que una onza de chocolate. Eso sí, ¡cuidado con la sorpresa de dentro!
El cereal aporta un tono crujiente muy interesante, pero la avellana hay que masticarla sí o sí. La verdad es que no soy muy fan de las avellanas, me parecen muy sosas y prefiero siempre como alternativa la avellana o el cacahuete. Pero en este caso, al mezclarse con el cereal pues se nota menos sosa.
También hay veces que he encontrado los frutos secos del chocolate demasiado “petrificados”, pero en este caso están en su punto: ni reblandecidos ni pétreos.
Una ventaja sobre el formato en tableta es que podemos ponerlo como aperitivo o dulce para acompañar un café sin desistir de la estética: parecen bombones redondos.
Además, es más apetitoso y manejable para compartir.
En cuanto al punto clave... sí, engorda. Pero tampoco hay que tomarse el paquete de una sentada, ¿no?
DETALLES TÉCNICOS o dónde y cuánto.
Al participar en el proyecto de trnd me facilitaron probar una bolsita de este producto, con un vale para una futura compra. Pero el caso es que ya he buscado por cinco supermercados diferentes (y de los nacionales, no creais)... y nada. Estoy ojo avizor para cuando aparezcan por las estanterías. Hay rumores de que en Alcampo lo podemos encontrar, pero no lo he podido comprobar porque me queda bastante lejos de casa.
Sobre el precio, sólo puedo decir el precio orientativo que facilita la empresa: 1,99 euros por 170 gramos de producto. Si es así, no está mal.
CONCLUSIÓN o si llenar la cesta.
El producto en sí está bueno, es un dulce bastante aceptable: me gustó el sabor, la textura y su aspecto.
El envase está bien, con un 10 a la apertura y un cero al autocierre.
En cuanto a la distibución, me abstengo de poner nota porque lo estoy achacando a que es un producto muy nuevo y habrá que darle un margen. Pero ya me estoy cansando de esperar, la verdad.
En cuanto al precio, correcto... pero sin confirmar.
Conclusión: si lo encontrase por fin en el supermercado, sí lo compraría de vez en cuando.
Fecha:07:06:09 13/01/12
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Categorías:Alimentación
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