La Kenzo Creation Homme Eau de Toilette es una fragancia con un aroma a madera que tira. No me gusta nada su aroma, pero a mi marido le encanta y se la pone con cierta asiduidad.
Yo la noto muy oriental. Me huele bastante a bambú.
La botella es bonita. Recuerda en su forma a las petacas que usaban los señores mayores hace años para guardar el tabaco. Mezcla los colores negro con líneas de otros colores y una banda ancha en blanco donde está escrita la marca.
Sus notas son: incienso, arroz, flor de cerezo, madera de Thanaka,... Huele muy a madera, como os he dicho.
Es una fragancia que se pega bastante a la piel de mi marido y se le pega aún más a la ropa, sobre todo a las corbatas. Tiene una perdurabilidad considerable.
Mi marido se la suele poner para salir de noche. De día dice que la encuentra poco apropiada porque tiene un toque sensual acusado.
No es barata. El frasco de 100 ml le costó 65 euros. La compra él. Yo no pienso comprarle esta fragancia que no me gusta.
Mi madre se la puso el otro día que estuvo en mi casa para mi horror. Ella dice que es de mujer. Ni hablar. Está a años luz de las fragancias femeninas. Ni siquiera se acerca a las unisex que poco me convencen.
No recomiendo ni dejo de recomendar la Kenzo Creation Homme Eau de Toilette. Si te gusta, cómprala. Hay fragancias masculina con unos aromas mucho mejores, pero para gustos están los colores que decía mi abuela.