Depilarme no es una tarea que me guste porque yo siempre aguanté muy mal el dolor. Tengo varias depiladoras eléctricas. La que más me gusta es la Solac Aissea Free.
Es una depiladora que recargas durante 8 horas y te da una autonomía de 50 minutos, tiempo de sobra para depilarte piernas, brazos, axilas, ingles y todo lo que necesites depilar.
Para las piernas tiene un cabezal. Para las zonas sensibles dispone de un segundo cabezal más pequeño. La puedes poner en dos velocidades. Yo suelo optar por la velocidad rápida para acabar antes.
Es una depiladora ideal para llevarla de vacaciones. Me tengo depilado las piernas hasta en el coche. Como dispone de un accesorio de luz puedes depilarte de noche en el mismo coche o en el baño del tren o del avión. Las tres cosas tengo hechas.
Lo mejor es el precio. Me costó sólo 22 euros, dinero que tengo más que amortizado.
No esperaba que me diera tan buenos resultados siendo tan baratita. Por una vez lo barato me ha salido bueno. Arranca muy bien el vello. Te lo arranca de raíz y a mí tarda varias semanas en volver a salirme. Además el vello que me sale nuevamente es mucho más débil. Lo que no noto es que me salga menos cantidad.
Para depilar axilas y línea de bikini va de cine. Gracias a su sistema de frío casi no sientes dolor. Es como si te dejara la zona anestesiada y no notaras tanto los tirones de sus 18 pares de pinzas.
Yo sólo le encuentro ventajas a la Solac Aissea Free.