El iClever Timbre es muy práctico porque funciona sin cables, lo que lo hace ideal para una puerta en la que no tienes una conexión eléctrica.
Este timbre tiene por un lado un transmisor y por otro lado un receptor. El pulsador o emisor es el aparato más pequeño. Es ahí donde tienes el botón que debes pulsar cuando quieres llamar, con su luz LED azul y el logo más el nombre de la marca en color blanco, haciendo un bonito contraste con el color negro del aparato.
Por otro lado tenemos el dispositivo receptor, más grande y también de color negro y de plástico resistente. En su parte central tiene una luz que se enciende cuando alguien está llamando. Es en este segundo aparato donde puedes elegir la melodía que más te gusta y el volumen. Te da la posibilidad de elegir hasta 52 cancioncillas.
El receptor debes conectarlo en un enchufe. Funciona a 230v. En la caja vienen la batería, que funciona con una pila de 1.5V tipo AA, y dos tornillos y sus correspondientes tacos, para que coloquemos el dispositivo transmisor en la puerta y cinta adhesiva de doble cara, por si optamos por pegarlo sin necesidad de poner tornillos.
Lo que no me gusta nada es el manual de usuario. Poco te aclara y menos lo hace si no sabes inglés. Está escrito de arriba abajo en inglés.
Os recomiendo este timbre sin cables. Es una manera de poner un timbre en la puerta de tu casa sin necesidad de llamar al electricista. Es una pena que sea un poco caro. Me costó 25 euros en Amazon. Podía ser un poco más barato. Menos mal que su batería te dura una eternidad y que el alcance del timbre es de unos 182 metros. Lo oyes en el fondo de la casa. Yo puse este timbre porque quería un timbre de quitar y poner para la puerta de mi dulce hogar.