Siempre estoy buscando chollos y me he apuntado a una página de subastas en la que puedes conseguir cosas muy baratas y fue así como conseguí un cupón para alojarme en este hotel. De otro modo nunca hubiera elegido este alojamiento, no por sus características, sino por su ubicación y es que en mi vida había oído Tapia de Casariego pero es un lugar que merece la pena , bonito, tranquilo y chiquitín, ideal para una escapada de fin de semana.
El hotel está situado a las afueras del pueblo, pero como es tan pequeño, las afueras están a 5 minutos del centro y a 10 minutos de la otra punta, así que la ubicación no es un problema. Además, tiene aparcamiento en la misma puerta y, en caso de estar lleno, hay muchos sitios por la zona.
Se supone que es un hotel, yo lo definiría como un hostal para ir a dormir y punto. No es un sitio en el que apetezca hacer vida y es que no tiene ningún equipamiento, bueno, tiene wifi gratis, que ya es algo. También tenía una pequeña tele, pero hasta ahí. Ya no os esperéis nada mas. La decoración era antigua, aunque el sitio estaba limpio. No resultaba acogedor pues se veía viejo, pero para lo que pagué (15€ la noche para dos personas) era suficiente.
El baño tenía ducha, toallas y sobrecitos con jabón y gel. El agua salía caliente y con presión y el cuarto estaba limpio.
Para mi es un hotel perfecto si estás de paso, para hacer noche o para pasar un par de días y visitar la zona. Desde luego para más tiempo no lo recomiendo pues al final notas la falta de comodidad y es que la cama de matrimonio era pequeña, el colchón no muy cómodo y la ropa de cama recordaba a las casas de las abuelas.
Lo mejor el trato por parte del personal y que tiene ascensor, que cargar con las maletas no resulta agradable.