¡¡Buenas a todos!!
En el puente del Pilar nos decidimos a visitar la comunidad autónoma de Asturias. Entre las ciudades que vimos, nos animamos con Oviedo y Gijón. Y como estuvimos allí unos cuantos días alojados nos tuvimos que buscar la vida a la hora de comer o cenar.
En esta ocasión me gustaría hablaros del restaurante El De Diez de La Gorda.
CARACTERÍSTICAS
El restaurante El De Diez de La Gorda se encuentra situado en la ciudad de Oviedo, perteneciente a la comunidad autónoma de Asturias. Se ubica exactamente en la calle San Franciso, 5 una calle cerca del centro de la ciudad.
Dispone de una página web oficial la cual es https://www.facebook.com/ElDeDiezdeLaGorda/ y un teléfono de atención al cliente el cual es 984 15 20 31.
Entre las atracciones turísticas más cercanas al restaurante se encuentran: el parque Campo de San Francisco, la Catedral de Oviedo, la estatua de la Regenta o la calle Uria, entre otros.
MI EXPERIENCIA PERSONAL
Os comentaba anteriormente que como nos hospedamos varios días en la ciudad de Oviedo, nos teníamos que buscar la vida a la hora de buscar un sitio donde comer o cenar. En este caso lo que queríamos buscar es un sitio para cenar.
Escuchamos que uno de los mejores cachopos de Asturias lo hacían en un restaurante que está cerca del parque Campo de San Francisco e íbamos para allí, pero a mitad de camino encontramos un local que nos llamó la atención desde fuera y decidimos probar.
Allí también teníamos la posibilidad de comer cachopo y en el otro lado por lo visto el cachopo iba acompañado de espárragos trigueros que a mi personalmente no me gustan, así que nos quedamos aquí a cenar.
El restaurante es de grandes dimensiones y tiene como dos partes bien diferenciadas. A nivel de calle, en la misma entrada vamos a encontrar la barra del bar a mano izquierda y a mano derecha varias mesas altas de pared para picar algo o tomarse algo. Al fondo, subiendo unas escaleras, en el piso de arriba hay un comedor.
Allí es donde nosotros cenamos ese día y como llevábamos una silla de niño tuvimos que subirla a pulso por las escaleras que no son pocas, aunque los chicos del restaurante nos ayudaron, un detalle.
La decoración del restaurante me gustó con sus luces modernas y medio anaranjadas en la parte de la barra y arriba con sillas antiguas de colegio. Enseguida nos atendieron y nos ofrecieron la carta.
La verdad que había bastante para elegir y ayudándonos de los consejos de la chica nos animamos a cenar un plato de cecina y un cachopo. Ambos platos vinieron en una tabla grande de madera con pizarra.
Lo primero que nos llegó fue la cecina que estaba increíble con un sabor ligeramente ahumado. Hasta ese día creo que no había descubierto el verdadero sabor de una cecina, y es que las de supermercado no tienen nada que ver.
Lo segundo que nos llegó fue el cachopo y estaba acompañado de un cucurucho de patatas fritas. El sabor del cachopo nuevamente nos sorprendió. Creo que estaba relleno de varios filetes de carne y queso y aquello estaba delicioso. No parecía a simple vista un cachopo gigante como vimos en algunos restaurantes, pero dijo la chica y ahí tenía razón. Que mejor un cachopo de tamaño normal con carne de calidad que no sea pesado comerlo.
Todo ésto, además de dos Coca-Colas y un servicio de pan, nos vino a costar exactamente 32,20 euros. De precio me pareció más que razonable teniendo en cuenta la calidad y sabor de la cena.
El trato de las camareras en todo momento amable y muy respetuosas.
CONCLUSIÓN
Como habéis podido comprobar es un restaurante que nos gustó y es por ello que os lo recomiendo. Además no está nada alejado del centro por lo que después o antes de ir, podéis seguir conociendo Oviedo.
Un saludo a todos.