"El cuarto poder" de Jeffrey Archer es una novela que me resultó más difícil de leer que otras novelas suyas. Por ejemplo, "Kane y Abel", una novela bastante similar en cuanto a protagonistas y trama, es mucho más asequible.
Los protagonistas son dos hombres de negocios que centran sus actividades en el mundo de los medios de comunicación. Richard Armstrong es un hombre que tiene que hacerse a sí mismo. Es un judío que empieza su vida huyendo de la Segunda Guerra Mundial y reinventándose hasta acabar en Gran Bretaña.
Keith, en cambio, tiene una vida mucho más fácil. Es el descendiente de una familia australiana propietaria de varios medios de comunicación. Llegará a Inglaterra para estudiar y allí aumentará el imperio familiar.
Como era previsible, los intereses de estos dos hombres ambiciosos van a entrar en conflicto y de eso va la novela, del enfrentamiento entre dos empresarios que se quieren hacer con el control de la prensa.
El autor intenta darle originalidad a la novela titulando los capítulos con los nombres de los diarios. Aun así no consigue que esta novela suya deje de recordarnos a "Kane y Abel".
Mea novela bastante peor que la citada "Kane y Abel", una de mis favoritas. Tienes la sensación de que la historia ya te la han contado. Igual que en "kane y Abel", ambos protagonistas te cuentan sus peripecias personales o, mejor dicho, el autor ando los puntos de vista de ambos en el relato.
La novela se hace larga con sus 629 páginas. Podía estar más resumida. Yo acabé con las sensación de que le sobraban 200 páginas por lo menos.
¿La recomiendo? Ni sí ni no. Si no has leído "Kane y Abel", es una buena lectura. En caso contrario, es leer más de lo mismo.