Le Male no es simplemente una de esas fragancias que pretenden jugar lo ambigüedad, sino que se trata de una de las pioneras en el estilo.
Se trata de una fragancia elegante, fina, dulce y agradable de oler y llevar, que es capaz de perdurar sin necesidad de convertirse en el típico perfume que más que embriagar lo que hace es atosigar al prójimo.
Del torso de marinero azul verdoso que representa su original envase, Gaultier se muestra también original en las cantidades que nos ofrece, pues nos ofrece presentaciones de 75, 125 y 200 ml., que no son nada al uso, todas ellas con vaporizador.
Por tanto, en si misma esta fragancia es algo diferente, que en su día fue transgresor a la par que divertido, pero que hoy se ha convertido en un clásico de éxito.
En cuanto a los precios, decir que Le Male bajo mi criterio no es una fragancia cara en comparación con otras de su nivel, pues la de 75 ml., cuesta unos 50 euros y unos 70 la de 125, lo que la hace bastante más rentable.
Por tanto su aroma y su precio hacen que se encuentre entre mis fragancias habituales.