Este clásico del mundo de la conserva, se nos presenta en packs de tres latas con aceite vegetal y sal como conservante.
Sobre su presentación tengo una opinión negativa, toda vez que su supuesto sistema abrefácil, no es el más apropiado, puesto que es bastante fácil cortarse al tirar de la lata, por lo que considero que pudiera ser sustituido por una tapadera de aluminio como la que presentan otras latas de la competencia.
Una vez que nos hemos deshecho de la tapadera, podemos observar como el atún carece de desperfectos como espinas, manchas oscuras, ni se presenta desmigado.
Una vez que lo hemos puesto en nuestro plato podemos comprobar que goza de una textura bastante firme, y una vez que nos lo introducimos en la boca, se muestra exquisito a nuestro paladar.
También podemos tener la certeza de que en su captura no se han matado delfines, lo que se ratifica con el logo “Dolphin safe” de su embalaje de cartón.
Su precio por lo general es ligeramente más alto que el de las marcas blancas, aunque en muchas ocasiones lo podemos encontrar en franca competencia con éstas, mediante las correspondientes ofertas, con lo que se puede concluir que se trata de un atún de buena calidad que nos es ofrecido a un buen precio.