¡Buenos días compañeros!
Hoy me gustaría hablar de mi cepillo de dientes electrico, un elemento, como sabeis, indispensable en nuestra higiene y
al que le debemos una bonita sonrisa.
Se trata de este cepillo Oral-B que corresponde al modelo Braun Oral-B Vitality Dual Clean D 12.013 P.
Como sabéis, los dentistas recomiendan siempre un cepillo eléctrico antes que un simple cepillo manual, y aunque los hay de distintos modelos y categorías, los manuales nunca llegan a limpiar con tanta precisión como lo hacen los eléctricos. Por ello mismo, en casa nos pasamos a los cepillos eléctricos hace ya años. Este, si no calculo mal, es el 6º que tenemos.
Oral-B es una buena marca que también está recomendada por los dentistas, así que es un cepillo de calidad a tener en cuenta.
Este cepillo es eléctrico y, como la mayoría de cepillos de estas características, tiene su cuerpo de plástico duro con partes de goma de color azul.
Este cepillo consta de dos partes fundamentales: El mango y los cabezales.
El mango es de textura lisa, bastante más pesado que un cepillo manual, y combina diferentes tonos de azulado. En el centro encontramos un pequeño pegote de goma blanca que contiene un botón; este es el botón de encendido y apagado; cada vez que le demos, pasará de un estado a otro. Para cargarlo, deberemos situarlo encima de su cargador y este deberá estar enchufado a la luz.
El cabezal, por su parte, es extraíble e intercambiable, de manera que el cepillo puede valer para toda la familia, siempre y cuando cada miembro tenga su propio cabezal. Estos cabezales pueden comprarse a parte, sin necesidad de comprar otro cepillo. Podemos encontrarlos en cualquier tienda de electrodomésticos que vendan cepillos de dientes eléctricos y no solo sirve para este tipo de cepillo, sino también podemos usarlo en otros tipos de cepillos Oral-B (tampoco en todos, así que si estáis pensando en comprar cabezales, aseguraros que son compatibles con vuestro cepillo).
Estos cabezales son distintos a los cabezales de otras marcas de cepillos de dientes eléctricos, por una sencilla razón; contiene dos tipos de fibras dentales; uno superior, de forma redondeada, y otro debajo de este, de forma más ovalada. Estos dos cabezales giran cuando encendemos el cepillo proporcionándonos mayor limpieza, ya que mientras uno se encarga de la base de los dientes, el otro lo hace del cuerpo y por tanto, la limpieza es superior. A esto se le debe el nombre “Dual Clean” que contiene este cepillo.
Los cabezales deben cambiarse con frecuencia de 2 a 3 meses, pero si no nos acordamos, este cepillo nos indica que ya hace falta un cambio cuando las fibras dentales empiezan a cambiar de color; el color se vuelve más apagado y estropeado, así como las fibras empiezan a “despeinarse”. Entonces deberemos buscar otros cabezales y tirar los estropeados a la basura.
Como ya os he adelantado, este cepillo funciona con batería; para cargarlo, tan solo deberemos ponerlo encima de la base del cargador. No puedo indicaros cuanto dura la batería pues nunca se nos ha terminado, y es que siempre que no estamos usándolo lo dejamos en el cargador para poder tenerlo siempre disponible.
Mi experiencia personal es buena.
Siempre le he dado mucha importancia a la limpieza bucal para evitar complicaciones y sobre todo la visita al dentista, que me da pánico. Por ello mismo, siempre he querido el mejor cepillo para mis dientes, aunque fuera caro.
La verdad es que, en este sentido, este no nos costó nada caro, pero funciona muy bien. Su doble cabezal nos convenció y decidimos llevárnoslo hace alrededor de año y pico. Desde entonces, hemos cambiado de cabezal siempre que nos lo ha pedido, siempre por los mismos cabezales.
El cepillo ocupa poco espacio, ya que el cargador de batería es pequeño, por lo que podemos dejarlo en cualquier sitio. Nosotros lo tenemos en un rincón del mueble del lavabo. Siempre lo ponemos a cargar, así nos aseguramos de que lo tenemos disponible siempre que lo necesitemos.
Su uso se hace muy sencillo, ya que solo es poner la pasta, meterlo en la boca y apretar el botón. Los cabezales empiezan a moverse, mientras tanto nosotros tenemos que ir frotando los dientes con este cepillo, apretando sobre ellos ligeramente para asegurar que la limpieza se realiza correctamente, pero tampoco apretando demasiado pues entonces pueden sangrarnos las encías. A los pocos minutos, la vibración para durante unos segundos; esto nos indica que ha pasado suficiente tiempo como para que nuestros dientes ya están limpios. Si seguimos, cuando vuelvan a pasar estos minutos, volverá a avisarnos. El dentista me dijo que aguantara hasta el segundo aviso antes de enjuagarme, así que yo lo hago así. En total, tardo unos 4-5 minutos.
Tras el lavado con este cepillo, no encuentro restos de comida entre los dientes ni malos sabores; tan solo el sabor de la pasta. Esto me gusta pues quiere decir que este cepillo ha limpiado toda mi boca y está libre de suciedad, esto es importante pues es el fin del lavado.
En casa lo usamos toda la familia; como sus cabezales son intercambiables, cada miembro tiene su propio cabezal que pone y quita siempre que va a usarlo. Diferenciamos los cabezales gracias a un arito de distinto color que tienen en la base; así cada uno tenemos asignado un color y es el que usamos.
En definitiva; yo estoy muy contenta con mi cepillo.
Así que yo os recomiendo que lo adquiráis, si quereis un buen lavado de dientes y de boca. Este cepillo es efectivo y no es caro.
Espero que mi opinión os haya sido de ayuda.
¡Un beso y gracias por leerme!