Una de mis cremas hidratantes favoritas es la Vichy Adaptative que siempre compro en la farmacia de mi barrio. Es una crema hidratante de color blanco y olor agradable, muy a crema, que a piel sin tiranteces, relajada, bien hidratada. Tiene unos efectos que se mantienen durante horas y horas.
Me la estoy aplicando mucho ahora en verano porque me aporta una sensación de frescor que no me aportan otras cremas hidratantes.
Pero no todas son ventajas. Las desventajas de esta crema son el precio y el envase.
Es una crema cara. El envase de sólo 40 ml me cuesta 22,55 euros. El último lo compré con rebaja, a 17 euros. Pero con rebaja y todo sigue pareciéndome una crema cara.
El envase es una cajita de cristal frágil. Te cae al suelo y rompe. Una me rompió en el cuarto de baño de un hotel. Otra me rompió en casa porque las niñas andaban jugando en mi tocador y acabó en el suelo. Deberían hacer envases que no fueran de cristal o al menos que fueran de un cristal más resistente.
La sigo comprando porque es una crema que me encanta. Me gusta mucho para aplicar después de exfoliar la cara con una exfoliante. Esta crema te deja la piel sin tensiones, relajada.
Está a la altura de otros productos Vichy en calidad. No defrauda lo más mínimo. Es tan buena que a ve le pongo un poquito a las niñas. Ahora en verano la necesitan para tener la piel bien hidratada. La Vichy Adaptative va genial para pieles secas o bien que se resecan mucho con el sol, como es mi caso.