Me encantan este tipo de olores. Las colonias que huelen a fresco, a cítrico o a hierba siempre me gustan y las alegorías de Guerlain suelen cumplir alguna de esas condiciones. Sin embargo, sin duda la mejor pues cumple todo es la allegoría de mandarina.
Su nombre nos hace suponer que entre sus notas vamos a encontrar mandarinas, que le dan a esta fragancia un aroma entre dulce y ácido que se matiza con un acabado herbal y fresco del te verde. Después de un rato la colonia se va endulzando, como cogiendo cuerpo. De ese modo ya no parece un olor tan fresco y es que ese olor que tiene justo al echarla parece evaporarse en segundos. El resultado es un olor a mandarina ligeramente aromatizada con albahaca y un acabado casi oriental al ámbar.
A priori el precio de la fragancia no es muy alto pues 125 ml rondan los 60 euros. Sin embargo, teniendo en cuenta su falta de fijación no os la recomiendo. Eso si, huele muy bien para usar a diario, ya sea para trabajar o ir de sport, pero tened en cuenta que muy poco tiempo después de echarla os la tendréis que renovar pues no quedará rastro alguno en la piel, un poquito más en la ropa, algo es algo.
Y desde luego sólo os la recomiendo en verano, que apetecen más las fragancias frescas y suaves.
Lo bueno, aparte de su olor y frescura, es que el tamaño del frasco es muy grande, con lo que aunque haya que renovarla a menudo, nos durará bastante.