En la C/Tres Cruces, que sale de la madrileña Gran Vía, se encuentra el Restaurante Artemisa, todo un clásico vegetariano de la ciudad de Madrid. Más de veinte años lleva Artemisa ofreciendo comida vegetariana (también elaboran menús veganos, sin huevo ni leche y platos para personas intolerantes a la lactosa y al gluten.
El local es bonito y coqueto, pero un poco pequeño, por lo que conviene reservar mesa incluso entre semana ya que, al disponer de un menú del día a precio asequible, suele estar lleno a la hora de la comida.
La atención de los camareros es buena y tanto para los vegetarianos como para los que no lo son, la carta es muy completa y variada, los platos están muy buenos y las raciones son muy generosas, aunque se pida el menú del día (que cuesta doce euros).
El pastel de espinacas es muy rico, el Tiramisú está francamente delicioso (tiene fama de ser de los mejores de Madrid) y, en el capítulo de las bebidas, una lástima que la cerveza de trigo no esté un poco más fría, porque está buenísima. Al final, para desengrasar, una infusión: de manzana con canela, de roiboos con vainilla, etc...
Como punto negativo, alguno de mis acompañantes encontró que ciertos platos estaban demasiado especiados, aunque yo personalmente prefiero la comida sabrosa y este aspecto a mí no me molestó.
Una recomendación: No dejéis de probar el Pastel Farah Diba, a base de setas rellenas de paté, trigueros, berenjenas y queso gouda, de los mejores platos vegetarianos que he probado.
Una curiosidad: Artemisa organiza cursos de cocina vegetariana, donde te enseñan a cocinar platos vegetarianos que se comen al final de la clase.
Dirección: C/Tres Cruces, 4 (Gran Vía, Madrid)
Teléfono: 915 218 721
Veredicto: 100% recomendable, incluso para los que creen que la comida vegetariana es aburrida. Cambiarán de opinión.