El H·Top BCN City, Barcelona, es un hotel de dos estrellas que merece la pena si estás dispuesta a que te despierten las señoras de la limpieza a las nueve y media de la mañana. Yo quedé a cuadros cuando me llamaron a la puerta a esa hora. Esperaba poco menos que una emergencia, no que las señoras de la limpieza me vinieran a levantar de la cama como si fueran mis madres adoptivas.
Está en la calle Travessera de Gràcia, 380-384. No es un hotel grande. Sólo tiene 40 habitaciones repartidas en cinco plantas.
Me llamó la atención que pudieras dejar las maletas en unas taquillas que te cobran a dos euros por día aunque no estés alojada en el hotel. Una manera como otra de ganarse la vida. Mi chico decía que los mochileros guardaban el equipaje y dormían en la calle en verano. Yo creo que mi chico tiene mucha imaginación.
Su ubicación es buena. en diez minutos de caminata te pones en la Sagrada Familia. El H·Top BCN City, Barcelona, está justo al lado del Hospital de Sant Pau. Esto no me gustó mucho. No me hace ninguna gracia dormir al lado de un hospital.
El H·Top BCN City, Barcelona no parece un dos estrellas. Yo le daría cuatro estrellas después de ver la habitación que nos dieron. Una habitación grande, bien limpia, decorada con sencillez pero buen gusto. Me gustó la habitación. También me agradó que nos recibieran con una bandeja de bombones que encontramos encima de una mesa auxiliar en nuestro cuarto. Todo un detalle. Hay hoteles de cuatro estrellas que no tienen ese detalle con los huéspedes.
La cama tenía el cabecero negro, lo cual hacía un bonito contraste con las paredes blancas. Los suelos eran de baldosa. Teníamos un televisor de plasma, una mesa, una silla, un armario no muy grande. Yo me sentí cómoda en aquel cuarto durante los tres días que estuvimos alojados yo y mi chico en el H·Top BCN City, Barcelona.
El cuarto de baño era más de un hotel del dos estrellas. Me apreció pequeño y la bañera era minúscula. Encima se veían los sanitarios bastante usados, aunque estaban limpios.
En limpieza tienes que darles un diez. Veías señoras de la limpieza pro todas partes. Para que no te despertaran a las nueve y media de la mañana tenías que dejar puesto un cartel de no molesten en la puerta.
Razón tenían en despertarte. Lo comprendí cuando llegamos por los pelos a la hora del desayuno. Lo sirven de ocho a diez de la mañana. Es un desayuno variado, con mucha bollería industrial, fiambre, algún queso que merece la pena, café, infusiones, cereales, fruta... No sales con hambre. Por tener tenía hasta yogur y unas salchichas bastante buenas.
Os recomiendo el H·Top BCN City, Barcelona. Su relación calidad precio es buena.