Parador de Cambados Pontevedra un Parador frente a la Ría de Arosa
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Cleo5
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Incidencias
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Acerca de:Parador de Cambados [Pontevedra]
Ventajas:dichas
Desventajas:dichas
El Parador de Cambados (Pontevedra) está en Paseo Calzada, s/n, de Cambados en la provincia de Pontevedra. Es un pazo del siglo XVII, el Pazo de Bazán, ubicado enfrente de la Ría de Arosa.
Por fuera no te llama mucho la atención. Es discreto, como la mayoría de los pazos gallegos, pero grande, sobre todo para una familia sola, como lo fue en sus inicios. En el siglo XVII había gente que vivía muy bien.
El jardín del pazo es coqueto, como de casa particular, pero bien cuidado. En el jardín hay una piscina limpia y no muy frecuentada por los huéspedes. Nosotros estuvimos nadando como en familia. Por eso fui más a la piscina que en otras ocasiones.
Me gustó el salón del Parador con sus columnas de piedra. Le daban grandiosidad. Los techos del comedor estaban forrados de madera. En la remodelación conservaron la decoración de otros tiempos. Todo un acierto. Así nos dan la posibilidad de vivir como vivían los ricos del siglo XVII, al menos durante unos días. Por eso me gustan tanto los paradores. Mi chico dice que le echo mucha imaginación a la vida, sobre todo cuando viajamos.
Nos dieron una habitación muy luminosas con vistas al jardín. Menos mal que no había mucha gente porque la insonorización no era gran cosa. Te despertabas todas las mañanas con el canto de la pajarería, gallos incluidos.
Me pareció una habitación muy espartana, sin lujos, con camas antiguas, colchas que recordaban otros tiempos, sillones con aspecto de tienda de antigüedades. Era como estar en la casa de tu tía abuela millonaria.
Nosotros fuimos solos, sin las niñas. No creo que mis hijas lo hubieran pasado bien. Se aburren bastante cuando las quitas de los hoteles de sol y playa. Su padre todavía no ha conseguido que se interesen por los alojamientos tranquilos que a él tanto le gustan.
Nos quedamos a comer en el restaurante del Parador. Me encantó la empanada de berberechos. El lenguado al albariño también estaba muy rico y de los mariscos ni os hablo. Mi marido no comió otra cosa que mariscos. Casi nos arruinamos con las mariscadas de él.
Por fuera no te llama mucho la atención. Es discreto, como la mayoría de los pazos gallegos, pero grande, sobre todo para una familia sola, como lo fue en sus inicios. En el siglo XVII había gente que vivía muy bien.
El jardín del pazo es coqueto, como de casa particular, pero bien cuidado. En el jardín hay una piscina limpia y no muy frecuentada por los huéspedes. Nosotros estuvimos nadando como en familia. Por eso fui más a la piscina que en otras ocasiones.
Me gustó el salón del Parador con sus columnas de piedra. Le daban grandiosidad. Los techos del comedor estaban forrados de madera. En la remodelación conservaron la decoración de otros tiempos. Todo un acierto. Así nos dan la posibilidad de vivir como vivían los ricos del siglo XVII, al menos durante unos días. Por eso me gustan tanto los paradores. Mi chico dice que le echo mucha imaginación a la vida, sobre todo cuando viajamos.
Nos dieron una habitación muy luminosas con vistas al jardín. Menos mal que no había mucha gente porque la insonorización no era gran cosa. Te despertabas todas las mañanas con el canto de la pajarería, gallos incluidos.
Me pareció una habitación muy espartana, sin lujos, con camas antiguas, colchas que recordaban otros tiempos, sillones con aspecto de tienda de antigüedades. Era como estar en la casa de tu tía abuela millonaria.
Nosotros fuimos solos, sin las niñas. No creo que mis hijas lo hubieran pasado bien. Se aburren bastante cuando las quitas de los hoteles de sol y playa. Su padre todavía no ha conseguido que se interesen por los alojamientos tranquilos que a él tanto le gustan.
Nos quedamos a comer en el restaurante del Parador. Me encantó la empanada de berberechos. El lenguado al albariño también estaba muy rico y de los mariscos ni os hablo. Mi marido no comió otra cosa que mariscos. Casi nos arruinamos con las mariscadas de él.
Fecha:08:26:52 18/09/16
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Votos:no disponible.
Categorías:Viajes
Etiquetas:hoteles, alojamiento, paradores, Galicia, Pontevedra
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