El Patinete plegable de adulto FUNBEE se ha convertido en el patinete de toda la familia. Hasta los abuelos lo usan. Es un patinete que llevamos en el maletero del coche y nos sirve para divertirnos subiéndonos de uno en uno para dar una vuelta. A mí me resulta más práctico que una bicicleta porque las bicicletas nunca fueron para mí.
Este patinete vale para toda la familia gracias a la altura regulable del manillar. Lo pones más abajo o más arriba según la altura del usuario. Por eso le estamos sacando tanto partido. El tubo y el manillar son de aluminio, muy resistentes.
En cuanto a seguridad es de lo más seguro que hay en patinetes en el mercado. Cuenta con un freno de acero que te frena el patinete hasta en las cuestas hacia abajo. No importa lo que peses siempre que no superes los cien kilos. Nosotros no pesamos tanto.
Lo que más me llamó la atención del patinete, cuando lo compré, fueron sus ruedas. Me parecieron grandes. Generalmente, los patinetes más que ruedas llevan ruedines. Este patinete lleva dos ruedas que son más grandes que las de algunos carritos de la compra. Son ruedas PU 230/180 mm.
El patinete no es de los más batatos. Me costó 79 euros. No es de los más baratos. Pero preferí pagar un poco más y llevar un patinete que fuera resistente. Reconozco que me costó decidirme porque el diseño del patinete no es atractivo. Por bonito no lo hubiera comprado. De hecho, tuve muchas dudas.
El Patinete plegable de adulto FUNBEE tiene el manillar de color blanco sucio y el resto del patinete es de color negro. No me gusta su diseño burdo. Es una pena que los fabricantes no hayan pensado en hacerlo bonito.
En toco caso, os lo recomiendo. El Patinete plegable de adulto FUNBEE vale para toda la familia. Esto lo hace ideal. Como os decía, nosotros lo usamos todos y estamos felices porque lo pliegas y lo guardas en cualquier sitio.