Noviembre Dulce es una película de esas un poquito empalagosas, pero dinámica a la vez. Y otra cosas más, prepara los kleenex porque al final terminarás llorando bastante, aunque no os puedo decir por que ya que os destrozaría la película.
La historia es bastante original ya que, aunque está basada en el típico chico conoce a chica, el desarrollo es muy diferente lo que resulta sorprendente y te tiene enganchado hasta que se descubre porqué la protagonista actúa como lo hace y es que es una forma de ser muy rara, nada convencional. Quiere vivir la vida, disfrutarla al máximo y cada mes elige a un hombre para pasarlo con el, para ayudarle en su vida.
Para noviembre ha elegido a Keanu Reeves, un agresivo publicista totalmente estresado que ya no disfruta de su trabajo ni de nada en general. Junto a ella aprenderá lo que es realmente importante en la vida, en ese mes que pasarán juntos.
No es el tipo de cine que suelo ver y me senté en el sofá un tanto escéptica, pero a medida que iban pasando los minutos me iba enganchando mas y mas y es que los actores (Keanu Reeves y Chalise Theron) lo hacen fenomenal y el guión está estupendamente conseguido.
Te hace pensar un poco y replantearte muchas cosas de la vida. A mí me apetece menos repantingarme en el sofá y salir mas para disfrutar de los pocos días libres que tengo al mes.
Como suele suceder en este tipo de peli hay trocitos de película más blanditos que podrían llegar a empalagar a los más duros, pero a mí me gustó todo. Lo peor el final, pero porque me agarré un buen berrinche. Ya se sabe que se tienen días más sensibles que otros y es que creo que la película no explota el tema lacrimógeno.