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Acerca de:Celda 211 [Daniel Monzón]
Ventajas:Ese monstruo que es Luis Tosar . Incita a la reflexión.
Desventajas:Tópicos carcelarios . Violencia .
Celda 211 es la nueva película del director, guionista y ex crítico de cine Daniel Monzón, (“La sombra del guerrero” y “La caja Kovac”).
Basada en la novela de Francisco Pérez Gandul, la cinta pertenece al subgénero carcelario, con pinceladas del cine “jincho” español de los años 80.
Juan (Alberto Ammann), alias Calzones, es un funcionario de prisiones novato que visita la cárcel de Zamora donde ha sido destinado la víspera de su primer día de trabajo. Durante su visita, estalla un motín liderado por un delincuente carismático y muy violento llamado Malamadre (Luis Tosar) en la zona de los FIES, los presos más peligrosos. Juan, tras ser abandonado a su suerte en la Celda 211 por sus compañeros funcionarios, se ve obligado a fingir que es un preso común más para lograr sobrevivir en prisión…
**MI CRÍTICA PERSONAL**
"Celda 211" os mantendrá pegados a vuestra butaca de principio a fin, tanto si sois amantes de las películas ambientadas en la cárcel como si no. Gracias a unos diálogos magníficos, unas buenísimas subtramas y un personaje, Malamadre.
La subtrama más interesante es la de los presos etarras. Sin embargo, resultan un poco tópicas las subtramas del narco colombiano interpretado por Carlos Bardem, la del funcionario de prisiones violento, interpretado por un Antonio Resines muy poco creíble y con sus tics de siempre, la del “negociador” del Ministerior del Interior, interpretado por Manuel Morón y la de la esposa embarazada del protagonista (Marta Etura). Lástima que todas estas subtramas no se desarrollen lo suficiente en la segunda parte de la cinta en la que, a mi modo de ver, se omiten detalles muy necesarios.
Respecto al trabajo de los actores, Luis Tosar está inconmensurable, como siempre. Logra una transformación asombrosa para dar vida a Malamadre, con esa voz cavernosa, tan grave. En mi opinión, una de las mejores interpretaciones de 2009, de ahí su Goya al mejor actor en la última ceremonia de premios del cine español.
El debutante Alberto Ammann hace un buen trabajo, eso sí a años luz de Tosar. Los secundarios (Morón, Bardem, Etura, etc...), de lujo y es que por fin vemos una película en la que los yonkies y los presos parecen de verdad, de hecho, algunos lo son en la vida real.
El film, cuya violencia puede llegar a angustiar al espectador en ciertos momentos está dotado, sin embargo, de un cierto sentido del humor, inesperado y que alivia en parte la tensión.
Una curiosidad: La película se rodó en la antigua Prisión de Zamora, donde cumplieron condena los ya míticos El Vaquilla y El Torete.
En definitiva, una buena película que os incitará a reflexionar sobre el sistema penitenciario español.
Basada en la novela de Francisco Pérez Gandul, la cinta pertenece al subgénero carcelario, con pinceladas del cine “jincho” español de los años 80.
Juan (Alberto Ammann), alias Calzones, es un funcionario de prisiones novato que visita la cárcel de Zamora donde ha sido destinado la víspera de su primer día de trabajo. Durante su visita, estalla un motín liderado por un delincuente carismático y muy violento llamado Malamadre (Luis Tosar) en la zona de los FIES, los presos más peligrosos. Juan, tras ser abandonado a su suerte en la Celda 211 por sus compañeros funcionarios, se ve obligado a fingir que es un preso común más para lograr sobrevivir en prisión…
**MI CRÍTICA PERSONAL**
"Celda 211" os mantendrá pegados a vuestra butaca de principio a fin, tanto si sois amantes de las películas ambientadas en la cárcel como si no. Gracias a unos diálogos magníficos, unas buenísimas subtramas y un personaje, Malamadre.
La subtrama más interesante es la de los presos etarras. Sin embargo, resultan un poco tópicas las subtramas del narco colombiano interpretado por Carlos Bardem, la del funcionario de prisiones violento, interpretado por un Antonio Resines muy poco creíble y con sus tics de siempre, la del “negociador” del Ministerior del Interior, interpretado por Manuel Morón y la de la esposa embarazada del protagonista (Marta Etura). Lástima que todas estas subtramas no se desarrollen lo suficiente en la segunda parte de la cinta en la que, a mi modo de ver, se omiten detalles muy necesarios.
Respecto al trabajo de los actores, Luis Tosar está inconmensurable, como siempre. Logra una transformación asombrosa para dar vida a Malamadre, con esa voz cavernosa, tan grave. En mi opinión, una de las mejores interpretaciones de 2009, de ahí su Goya al mejor actor en la última ceremonia de premios del cine español.
El debutante Alberto Ammann hace un buen trabajo, eso sí a años luz de Tosar. Los secundarios (Morón, Bardem, Etura, etc...), de lujo y es que por fin vemos una película en la que los yonkies y los presos parecen de verdad, de hecho, algunos lo son en la vida real.
El film, cuya violencia puede llegar a angustiar al espectador en ciertos momentos está dotado, sin embargo, de un cierto sentido del humor, inesperado y que alivia en parte la tensión.
Una curiosidad: La película se rodó en la antigua Prisión de Zamora, donde cumplieron condena los ya míticos El Vaquilla y El Torete.
En definitiva, una buena película que os incitará a reflexionar sobre el sistema penitenciario español.
Fecha:18:29:48 14/04/10
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Votos:1
Categorías:Ocio y cultura
Comentarios:1
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