De Chevrolet no esperéis encontrar mucho en este monovolumen, pues se trata de un modelo de la antigua Daewo, que fue comprada por la casa americana.
Si bien en cuanto a las prestaciones de su motor y chapa no tengo nada negativo que decir, sino más bien parabienes, pues responde la que uso a la perfección, si que en cambio tengo que criticar algunos aspectos de este vehículo.
Lo que menos me gusta es las calidades empleadas en los plásticos interiores del vehículo, especialmente las manillas de apertura de las puertas, que he podido ver como una se ha roto con apenas un par de años de uso, concretamente la del copiloto.
Esta escasa calidad en los plásticos, hace sospechar que se han reducido costes en elementos no fundementales del vehículo, lo que a la larga puede revertirnos en forma de averias.
Por lo demás decir que al igual que los plásticos no son muy allá, decir que no es cara en cuanto a repuestos, es relativamente fácil de reparar en comparación con otros vehículos, al menos en cuanto a lo esencial, y que guarda una relación calidad precio bastante aceptable, aunque se ha visto adelantado en cuanto a tecnología se refiere, por otros monovolúmenes de la competencia similares.
En definitiva, no responde al concepto que tenía de esta marca, aunque no me ha defraudado tampoco.