Cocidito madrileño
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Incidencias
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Acerca de:Restaurante La Bola [Madrid]
Ventajas:Raciones abundantes, buen servicio
Desventajas:Nada
Viajo mucho a Madrid por motivos laborales. Acostumbro también a servirme de estos viajes para conocer la ciudad, sus lugares más turísticos y sus restaurantes. Ese fue el motivo por el que aproveché para conocer este sitio, ya que me lo recomendaron expresamente.
Se encuentra en lo que llamaríamos en el centro neurálgico o histórico de la ciudad y debe su nombre a la calle en la que se encuentra, en la zona de Santo Domingo, muy próxima al Palacio Real, Gran Vía y Plaza de España. Es muy cómodo y fácil llegar allí por su buena ubicación. Recomiendo hacerlo en metro, ya que hay varios estaciones cercanas, en particular la de Santo Domingo. Aunque está en el número 5 de la mencionada calle de la Bola, se distingue fácilmente porque su fachada llama la atención por su color rojo muy vivo y tiene el aspecto de las antiguas tabernas madrileñas.
Y no sólo ese aspecto a añejo se observa exteriormente, sino que cuando entras en la sala (hay varias con diferente capacidad), una vez traspasada la zona de barra donde puedes tomar algo mientras esperas a que te llegue el turno, te das cuenta que tanto el mobiliario como el resto de la decoración nos trasladan al viejo Madrid del siglo XIX. Las paredes están decoradas con fotografías enmarcadas de las personas ilustres y/o famosas que han pasado por allí.
El servicio es amable y servicial y muy rápido en su cometido. Una vez te sientas a la mesa, perfectamente engalanada con manteles blancos y vajilla del mismo color, te sirven un aperitivo, para servirte a los pocos minutos la especialidad de la casa: el cocido madrileño. Para quienes no sean de la zona, decir que es posible que se sorprendan del rito del cocido en este sitio: comienzan por ponerte los fideos cocidos sin más en un plato. A continuación traen unos pucheros donde está el caldo junto con los otros ingredientes, que diligentemente vierte el camarero sobre nuestro plato. Una vez terminada la sopa, nos sirven el resto, es decir: los garbanzos, el chorizo, la carne de morcillo (exquisita), etc. El repollo lo sirven aparte, en otro plato.
Para concluir, tengo que decir que las raciones son abundantes, por lo que no pudimos tomar postre, a pesar de tener un aspecto delicioso. El precio ronda los 20 euros por persona, pero merece la pena.
Se encuentra en lo que llamaríamos en el centro neurálgico o histórico de la ciudad y debe su nombre a la calle en la que se encuentra, en la zona de Santo Domingo, muy próxima al Palacio Real, Gran Vía y Plaza de España. Es muy cómodo y fácil llegar allí por su buena ubicación. Recomiendo hacerlo en metro, ya que hay varios estaciones cercanas, en particular la de Santo Domingo. Aunque está en el número 5 de la mencionada calle de la Bola, se distingue fácilmente porque su fachada llama la atención por su color rojo muy vivo y tiene el aspecto de las antiguas tabernas madrileñas.
Y no sólo ese aspecto a añejo se observa exteriormente, sino que cuando entras en la sala (hay varias con diferente capacidad), una vez traspasada la zona de barra donde puedes tomar algo mientras esperas a que te llegue el turno, te das cuenta que tanto el mobiliario como el resto de la decoración nos trasladan al viejo Madrid del siglo XIX. Las paredes están decoradas con fotografías enmarcadas de las personas ilustres y/o famosas que han pasado por allí.
El servicio es amable y servicial y muy rápido en su cometido. Una vez te sientas a la mesa, perfectamente engalanada con manteles blancos y vajilla del mismo color, te sirven un aperitivo, para servirte a los pocos minutos la especialidad de la casa: el cocido madrileño. Para quienes no sean de la zona, decir que es posible que se sorprendan del rito del cocido en este sitio: comienzan por ponerte los fideos cocidos sin más en un plato. A continuación traen unos pucheros donde está el caldo junto con los otros ingredientes, que diligentemente vierte el camarero sobre nuestro plato. Una vez terminada la sopa, nos sirven el resto, es decir: los garbanzos, el chorizo, la carne de morcillo (exquisita), etc. El repollo lo sirven aparte, en otro plato.
Para concluir, tengo que decir que las raciones son abundantes, por lo que no pudimos tomar postre, a pesar de tener un aspecto delicioso. El precio ronda los 20 euros por persona, pero merece la pena.
Fecha:15:26:32 13/07/09
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Votos:no disponible.
Categorías:Viajes
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