El Princesa de Benidorm

Acerca de:Hotel RH Princesa [Benidorm]
Ventajas:bien situado
Desventajas:ninguna
Con motivo de una boda en Málaga, aprovechamos ya que teníamos que hacer el viaje en pasar unos días en alguna playita para descansar un poco, por lo que nos alojamos en este hotel que está en Benidorm, en el mes de octubre.

El tiempo en octubre en aquella época es bastante bueno la verdad, por lo que este hotel nos pareció una interesante opción de alojamiento ya que el centro de la ciudad se encontraba relativamente cerca y así podíamos combinar un poco el relax con visitas a la ciudad.

Impresiona bastante el hotel, por fuera, ya que son 16 plantas lo que tiene, por lo que es muy alto, así que el que se aloje en las últimas plantas debe de tener unas vistas de impresión. Nosotros estuvimos alojados en la cuarta planta, pero la verdad es que bien.

No miramos mucho las características del hotel, sin mas que estuviera cerca de la playa y de la ciudad y nos recomendaron este.

Una vez que llegas la hotel, podéis dejar le coche en el garaje del hotel si no encontráis aparcamiento fuera. Nosotros menos dos días pudimos dejarlo en los alrededores del hotel.

Una vez que el coche estaba aparcado, no sacamos las maletas sino que entramos al hotel para hacer el papeleo pertinente y que nos dieran las llaves de la habitación. Entramos en el hotel y nos encontramos una recepción, bastante amplia, y en ella el mostrador al que teníamos que ir. Tras andar unos breves pasos, llegamos a él con la suerte de que no había nadie esperando por lo que no tuvimos casi que esperar, la atención fue rápida y correcta y seguidamente nos fuimos al hotel, llave en mano, para bajar entonces las maletas y subirlas a la habitación.

Para subir a las habitaciones, con 16 plantas, pues el ascensor, claro, pero también hay escaleras por si acaso. Hay un total de 4 ascensores que según las disponibilidad del hotel así será le tiempo que tardas en cogerlo. No me imagino lo que puede ser coger el ascensor en plena temporada alta... Nosotros estábamos en la cuarta planta, por lo que subimos en ascensor, que tardo un poquito, pero bueno son muchas plantas y si está arriba pues lo normal... El ascensor era bastante amplio y cómodo, además de estar limpio y poseer buen olor. Algunas veces nos hemos montado en algún ascensor y el olor no era muy bueno, olía a una mezcla entre viejo, tabaco y no se que mas... Pero en este no, olía a fresquito, daba gusto.


Tras salir el ascensor y buscar nuestra habitación cargados con las maletas, llegamos a la habitación. Habitación acogedora, amplia y cómoda en la que predominaba el estilo sencillo y elegante con colores blanco y azul. Una ven la habitación, lo primero que hicimos fue colocar la ropa, para que no se arrugase más. El armario que teníamos era bastante amplio, teníamos perchas y había cajones en los que poder dejar las camisetas, la ropa interior, los jerséis...

Acompañando a la habitación y justo al entrar teníamos el baño, que se caracterizaba por ser cómodo, amplio y bastante limpio. Un gran espejo, una buena bañera, así como espejo de aumento y secador de pelo eran algunas de las cosas que podíamos encontrar en el. Y como siempre, nuestra cestita con las miniaturas que siempre vienen tan bien. Nada que echar en falta en el baño que no tengas en casa, muy cómodo. Las toallas te las cambiabas siempre y cuando las dejases en el suelo, como viene siendo bastante habitual ahora en los hoteles para el ahorro tanto de agua como para conservar el planeta.


La cama, en nuestro caso, de matrimonio, con buena calidad en el tejido de las sábanas, eran bastante buenas, y a ambos lados las dos mesillas y por supuesto nuestro punto de luz, muy útil por las noches, independiente por si quieres leer mientras tu acompañante duerme por ejemplo.

En frente de la cama, lo normal de todos los hoteles, la tele, el minibar y la mesa de escritorio.

Una de las cosas que aprovechamos poco fue la terraza, ya que el tiempo no nos acompañó mucho, no era muy grande pero para dos estaba muy bien.

Sinceramente no puedo decir que destaque la habitación por algo especial era nomadita pero estaba bien, nos resulto cómoda los días que estuvimos.

Como no nos hizo un tiempo muy agradable para baño, pues la verdad es que pudimos usar la piscina climatizada en lugar de la que tienen al aire libre. había de dos piscinas climatizadas, bastante amplias, cada una de un tamaño, en las que podías bañarte tranquilamente, el ambiente de las mismas no agobiaba como en otras y no había casi nadie, por lo que mucho mejor, podías incluso nadar un poquito. había jacuzzi, que al haber poca gente pudimos disfrutarlo un poquito, así como diferentes chorros de agua. Podías bajar tus toallas, pero si querías usar las del hotel, había que dejar una fianza; fianza que era devuelta una vez que las entregabas. Nosotros copiamos las del hotel, para no tener que estar secando las nuestras, que es un poco rollo y más dejándolas por las sillas en la habitación. Me gusto que hubiera taquillas donde poder dejar la ropa, ya que estabas en la piscina sin tener que estar preocupado por lo que dejas. Las taquillas seguían el mismo régimen que las toallas dejabas la fianza y al recoger las cosas se te devolvía. Las piscina tenia sus socorristas, por lo que podías estar tranquilo, además siempre pendientes de todo.

Para cercarse a la playa, había que andar un poquito, unos diez minutos andando, pero el camino está muy bien.

Con respecto a la comida, el restaurante del hotel se encontraba en el sótano, por lo que tenias o bien que bajar por las escaleras o en ascensor, en nuestro caso ascensor. Aunque si veníamos de la calle y era la hora de la comida o cena, pues bajábamos andando si no subíamos a la habitación. Las comidas eran bastante variadas y siempre de tipo buffet. No ha sido de los mejores que he estado pero bueno , se podía comer, al menos. Estuvimos alojados en régimen de media pensión por lo que una de las comidas la hacíamos fuera, en alguno de los sitio que había por los alrededores.

Par aquellos que les gusten los masaje y el cuidado del cuerpo el hotel dispone de Saa y de gimnasio. Yo no lo usé.

Una de las cosas que me gustaba es que tenia un restaurante que por las noches se convertía en zona de baile por lo que daba mucho ambiente al hotel y además era una forma de mantener entretenido a los cliente y de no quedarnos en las habitaciones viendo la tele.

A los que les guste navegar y buscar información como nosotros, pues súper bien, porque gratuitamente podías navegar en la habitación, aunque era necesario avisar en recepción para que te dieran l clave de acceso. La conexión era por wifi y bastante buena.

En sus alredodores vas a poder pasear, así como hacer compra, ya que hay supermerados, bares, restaurante y tiendas de diversos tipos en sus alrededores.

Nos llevamos un buen recuerdo del hotel, que en repetidas ocasiones hemos recomendado tanto por la limpieza como por el trato y comodidad. Si queréis pasar una buena estancia, cómoda, agradable y entretenida, desde luego este hotel es un buen candidato.

Saludos
Fecha:10:50:55 07/04/10
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Votos:no disponible.
Categorías:Viajes