Un hotel con grandes deficiencias

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Scarlett2000
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Acerca de:Hotel Nazaríes Business & Spa [Granada]
Ventajas:lo dicho
Desventajas:lo dicho
El Nazaríes Business & Spa de Granada nos salió bastante bien de precio: 70 euros alojamiento con desayuno incluido.

Está situado a las afueras de Granada, entre el Parque de las Ciencias y un centro comercial que no era nada del otro mundo.

Nada más entrar recibes una buena impresión con la entrada. Es de las que no te deja indiferente. Piensas que has estado acertada a la hora de decantarte por este hotel. Mi marido flipaba con la lámpara que colgaba desde el alto del edificio. Casi parecía que estábamos en un hotel de lujo de Oriente.

Tuvimos que contentarnos con una habitación de dos camas, que estaban separadas para más inri por una mesilla de noche. Las habitaciones de cama de matrimonio estaban ocupadas. Pero dormí como una bendita. El colchón era cómodo, de fuelles, pero cómodo. Las sábanas olían a limpio.

Mi decepciones empezaron al día siguiente, cuando, ya más despierta, descubrí imperfecciones como una luz fundida, el cubo de baño sin pedal, la mampara de la bañera mal colocada, la pintura del cuarto de baño pidiendo pasar a la historia,... Me asomo a la ventana y veo la preciosa entrada del centro comercial. Lo de preciosa lo digo con ritintín. No era nada bonito. ¿Y las cortinas tienen agujeros? Sí señor. Alguien le pasó un cigarrillo y las bordó a fuego lento.

Voy a darme una ducha relajante y noto que falta el albornoz del hotel. Menos mal que mi marido está siempre al quite y corrió al centro comercial a comprarme uno.

La segunda noche no pude pegar ojo con el ruido que hacía el aparato del aire acondicionado. Pensé que quedaba sorda. ¡Por Dios! Encima en recepción, muy amablemente eso sí, me decían que no estaba estropeado.

La tercera noche al ruido del aire acondicionado se unió una fiesta que me montaron debajo de la ventana unos chicos que hacían botellón. Estuve tentada a bajar con unas cervezas y sumarme a su fiesta. Si no lo hice, fue porque mi marido es antibotellones.

Afortunadamente los desayunos eran suculentos. Yo que soy de las que despacho el desayuno con un café solo, asalté los cereales, el zumo de naranja, la fruta y hasta me fueron las salchichas, que en condiciones normales no pruebo ni loca.

No es un hotel que recomiende. Salí más cansada tras una semana que salgo cansada de trabajar algún día. Ni siquiera las horas que pasé en el gimnasio del hotel sirvieron para relajarme.
Fecha:08:33:14 27/10/10
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Votos:no disponible.
Categorías:Viajes