Por cuestiones de trabajo suelo comer mucho en restaurantes fuera de casa y tengo que decir que éste es mi local favorito, aunque hay que reconocer que los sus precios son un poco elevados, acorde con un toque adicional de calidad y exclusividad. En este sentido, se paga por lo que se recibe, lo único que quiero decir es que salvo que seamos realmente pudientes no es un sitio para comer todos los días, pero en ocasiones especiales es un sitio excelente al que ir a comer. En mi caso, suelo llevar a este restaurante a clientes "especiales" y siempre salen muy satisfechos.
Lo mejor que tiene este restaurante es que ofrecen una comida traidional catalana pero aportándole un punto de modernidad, algo distinto. Es decir, que para los que conocemos la gastronomía catalana en cualquiera de los platos que ofrecen se reconocen estos elementos tradicionales, es un "este sabor me suena", pero al mismo tiempo también es un "tiene algo distinto", realmente logran conservar los sabores tradicionales pero ofreciendo algo inesperado.
Respecto al servicio, pues bastante bueno, como dije este restaurante es algo más caro que lo que podríamos considerar "nivel medio" pero ofrece un servicio acorde. Quizás un punto débil es que su carta sea un poco corta, se echan de menos más platos.
Pues eso, un restaurante ideal para celebraciones o eventos importantes.