Voy a comenzar esta opinión diciendo que firmé la hipoteca en junio del año 2008, una época en que las condiciones bancarias eran mejores que las actuales. Así, ING me ofreció su Hipoteca Naranja al Euribor + 0’33 si domiciliaba la nómina, y Euribor + 0’45 si no la domiciliaba. Fue lo más barato que encontré. Pero recientemente observé que la oferta actual de la hipoteca naranja es de Euribor + 0’79 domiciliando la nómina y contratando el seguro de vida. La diferencia con las condiciones que yo firmé es significativa, casi medio punto de diferencial y todo un seguro de vida. En este aspecto he tenido suerte, porque las condiciones que firmé son favorables y para toda la vida del préstamo.
La verdad es que creo que es un poco caro y es prácticamente lo que ofrecen el resto de bancos. Creo que es debido a que en la actualidad el banco ING no apuesta por acaparar hipotecas, su campaña publicitaria tiende a la búsqueda de las Cuentas Naranjas y activos. En esta época que vivimos de crisis financiera, prácticamente todos los bancos están basando sus políticas financieras en aumentar su activo y disminuir el pasivo, de ahí que oferten fondos y dejen de lado los préstamos hipotecarios.
Como en todos los productos de este banco holandés, la hipoteca naranja no tiene ningún tipo de comisión. No se le aplica ningún tipo de gasto de apertura, ni de mantenimiento, ni de subrogación, ni de cancelación total anticipada ni por cualquier amortización parcial de capital que realicemos.
En este ámbito me voy a centrar. El coste por cualquier amortización de capital es cero, ya sea total o parcial, estableciendo un mínimo de 1.500 euros para las amortizaciones parciales. Se aplica este mínimo para evitar que se amorticen cantidades muy pequeñas y eliminar así molestias innecesarias. En parte tiene su lógica. Recomiendo a todo el mundo que tenga hipoteca, ya sea en ING o en cualquier otro banco, que cuando tengáis algún ahorrillo que no vayáis a gastar lo invirtáis en vuestra hipoteca, os ahorraréis mucho dinero en intereses. Aparte de que es la única forma para llegar a los 9.000 euros, para maximizar las ventajas fiscales. Recordar que nos podemos desgravar un 15% de un máximo de 9.000 euros de hipoteca cada año.
La revisión del tipo de interés de aplicación se realiza semestralmente, cogiendo como referencia el último tipo publicado en el BOE en cada periodo de interés, esos seis meses. Un ejemplo para que se entienda más fácil. En mi caso, se me revisa el tipo en enero y julio de cada año. Por tanto, me aplicarán el último Euribor publicado en el BOE de diciembre y junio de cada año.
En mi opinión, lo peor, debido a su carácter de banca on-line, es que no suelen informar por correo postal. Al principio, cuando firmé la hipoteca me mandaban por correo los recibos mensuales de las cuotas de la hipoteca, pero dejaron de hacerlo en mayo de 2009, quizá para ahorrar costes, no lo sé. Actualmente las únicas cartas que recibo son los recibos de amortización cuando la hago, y las actualizaciones del tipo de interés que me aplican cada vez que me lo cambian. Es decir, unas cuatro cartas al año, una carta cada seis meses informándome del tipo de interés que me aplican en cada revisión, y una carta con el recibo de cada amortización que realizo.
A pesar de los inconvenientes típicos de la banca on-line, principalmente la no existencia de sucursales, tampoco hay que olvidar la gran ventaja de este tipo de banca, que es que podemos ver toda la información de nuestra cuenta desde nuestro ordenador, incluso información que jamás nos plantearíamos preguntar a la cajera o director de nuestro banco habitual. Por ejemplo, podemos ver toda la información sobre el cuadro de amortización de nuestra hipoteca desde el inicio hasta el fin, o realizar simulaciones de amortización de reducir cuota o plazo de tiempo antes de ejecutar la operación. Así, siempre podemos ver nosotros mismos nuestros historiales y calcular mejor lo que nos conviene.
Por último, comentaros que es obligatorio por ley contratar un seguro de hogar, cada vez que nos compremos un piso o alguna propiedad inmobiliaria. Al firmar la hipoteca naranja, ING me ofreció un seguro de hogar, de Mapfre, que creo que tiene un buen precio. Yo contraté únicamente el seguro de contingente y pago sobre los 150 euros anuales.
En conclusión, tener la hipoteca en ING no es un engorro, sólo es necesario disponer de internet. En el momento de firmar mi casa, ING fue el banco que mejores condiciones con diferencia me ofertó y por eso lo elegí. Hoy en día la diferencia entre bancos se ha reducido, y la hipoteca naranja ya no es un chollo como antes. A la pregunta de si estoy contento con la hipoteca naranja es sí. Sólo os digo que antes de firmar una hipoteca sopesar todas las condiciones y momentos, porque pensar qué vais a estar pagándola durante treinta años. Un saludo.