Creo que la definición perfecta para esta colonia sería que “es un clásico entre los clásicos” y es que su aroma e el de las fragancias frescas de todo la vida. Yo no se lo que lleva, no conozco sus notas de fondo, corazón ni salida, pero a mi me huele a limón. Si, simple y llanamente a limón.
No me entendáis mal, no es que me huela como cuando cortas un limón por la mitad y ya está, no, ese aroma a limón es bastante sutil, como de fondo, con notas amaderadas, pero es un olor que lo hace inconfundible y claramente identificable.
Si alguien se ha perfumado con Arman clásico y lo tienes cerca, lo vas a notar ya que deja un rastro fresco y cítrico. No es que sea especialmente intensa, pero como es un olor tan marcado y definido lo notas.
A mi me encanta. Huele a limpio y fresco y se mantiene durante todo el día. Mi chico lo usa para trabajar y cuando yo me levanto (2 horas después de que se haya marchado) todavía lo noto en casa. Y después, cuando regresa del trabajo su ropa sigue impregnada con el aroma, así que en perdurabilidad en la ropa le pongo un 10 y en la piel un 7.
Debido a su tremenda frescura es una colonia que yo clasificaría como de sport o para ir a trabajar, pero no para usar por la noche ya que se queda un poco corta. Para esas ocasiones a mi me gustan fragancias con un poquito mas de cuerpo.
Hay diferentes tamaños de venta. Siempre sale más rentable comprar el grande, sobre todo en colonias de este tipo, tan fresquitas y es que tiendes a echarte más cantidad cuando te perfumas. El tamaño de 200ml cuesta 122 euros, pero también hay tamaños de 100 y 50. Además es una colonia con desodorante en stick y after shave.