Cicalfacte es la crema milagro de Avène. Se trata de una crema reparadora, que no hidratante, que sirve para casi todo: granitos, rozaduras, escoceduras, arañazos, etc... Gracias a su formulación, que contiene sulfatos de cobre y zinc y agua termal de Avène, ayuda a que la piel cicatrice y se regenere.
Personalmente, me gusta mucho esta crema. De hecho, no falta nunca en mi botiquín. Hipoalergénica, no comedogénica y sin perfume, su textura es espesa y tarda un poco en absorberse del todo. Aun así, yo la uso para todo: para esos granitos que salen de vez en cuando en la cara, para las pequeñas quemaduras caseras (cocina, plancha), para los arañazos y rozaduras de los niños, etc...
Se puede adquirir en farmacias y parafarmacias, y por supuesto online. Su precio en tiendas físicas ronda los diez euros el tamaño de 40 mL. Online es más barato, por supuesto.
Aunque a priori parece un precio un poco elevado, en realidad cunde mucho, ya que es necesario utilizar muy poquita cantidad en cada aplicación.
Únicamente le encuentro una desventaja: su fórmula contiene aceites minerales. No obstante, no contiene parabenos, y puede utilizarse incluso en bebés.