El Gel Chocolate fabricado por el Instituto Español se está convirtiendo en uno de mis geles favoritos, sobre todo por el olor a chocolate que desprende nada más abrir el tapón del envase. Me recuerda mucho a los baños de chocolate que te dan en un spa del que es clienta habitual mi madre.
No es un gel excesivamente caro: me costó 2,69 euros el frasco de 750 ml que me da para un montón de tiempo, aun siendo generosa con las cantidades que me aplico en cada ducha o baño.
El envase es semitransparente. Ves la cantidad que vas gastando y así sabes cuando tienes que reponerlo. También te haces una idea con lo que pesa, pero parece que cuando ves como va yendo a menos, te animas más a comprar el siguiente frasco.
Además de su olor encantador, me gusta que entre sus componentes se encuentre la glicerina. Yo me decanto mucho por un gel y otro si llevan o no glicerina. Es ideal para pieles que tienen tendencia a secarse, como la mía. Entre el chocolate y la glicerina te queda una piel como la de un bebé tras un baño relajante.
Es un gel que parece chocolate espeso. Si te gustan los geles más líquidos, éste no es el tuyo. Como dije, parece que te estás regalando en tu bañera una sesión de terapia de chocolate de ésas que son frecuentes en los balnearios. La espuma que se forma también es marrón, pero más clarita que el contenido que sale del frasco. No hace tanta espuma que yo pensaba cuando lo compré por primera vez. Esto me desagrada un poco porque yo soy muy de geles y champús que hacen espumita. Cuanta más espumita, más sensación de higiene me dejan.
De hecho, yo cuando me baño con este gel de chocolate suelo darme otra enjabonadura con otro gel. El gel de chocolate me deja la piel muy hidratada, pero la sensación de limpieza no consigue dejármela. Aun así, el olor se impone a cualquier otro gel que puedas usar para una segunda ducha. Es un olor persistente. Se impone hasta al perfume. Yo cuando me ducho con el gel de chocolate paso de perfumarme porque todavía no he encontrado un perfume que imponga su aroma al gel.
En resumen, me parece un buen gel y está muy bien de precio dada su calidad, sobre todo en lo que se refiere a hidratación y a relajación. Lo recomiendo.