Esta novela nos presenta la vida de un edifico de un barrio parisino pudiente desde la perspectiva de una portera y una niña de doce años.
En ambos casos nuestros personajes aparentan ante los demás ser lo que no son, la portera esconde un intelectual y la niña una superdotada, en las que se produce un meticuloso análisis interior basado en la observación de todo cuanto acontece a su alrededor.
Su autora, la francesa Muriel Barbery, nos conduce a través de la historia con un lenguaje brillante y enriquecedor, pero sin que por ello deje de ser ameno y entretenido.
Muriel Barbery a través de la lectura de las poco más de cuatrocientas páginas de su novela, nos invita a reflexionar junto a sus personajes sobre la importancia de las cosas pequeñas que suceden a nuestro alrededor y a mirar con optimismo el futuro.
Sin duda es un libro que me ha sorprendido de forma muy grata, por lo que no puedo más que recomendarlo pese a que su precio no me resulta para nada barato, y menos en estos tiempos de crisis (entre 18 y 20 euros aproximadamente).
En cuanto al formato en que lo poseo, es el habitual utilizado ultimamente por la editorial Seix Barral,con una estampación sobre el fondo blanco de sus tapas blandas.