La Zanahoria Vinilo la compré para regalársela a una perrita muy mona que tiene mi madre. Me pareció ideal porque en la tienda de mascotas me dijeron que salía resistente para perros pequeños y medianos. Así ha sido. La perrita de mi madre lo muerde y no consigue romperlo.
Es un juguete de unos 19 cm de longitud que hace un ruido agobiante cuando lo aprietas. El ruido en cuestión le encanta a nuestra perrita y a mis niñas. Yo no puedo decir que me guste mucho. Me acaba con los nervios.
Pero la ventaja es que tienes a la perrita entretenida con el juguete. Y a mis hijas también. Juegan las tres mientras los mayores hablamos de nuestras cosas sin interrupciones.
La zanahoria tiene un diseño muy conseguido. Parece una zanahoria tal cual si no fuera por la simpática carita que tiene dibujada debajo del ramaje verde. Es igualita a las zanahorias de rama que yo compro alguna vez en la frutería, a esas zanahorias que son más tiernas que las que vienen en bolsas o te venden por peso. Me refiero a las zanahorias de manojo.
Volviendo a la Zanahoria vinilo he de decir que está tirada de precio. Me costó 1,50 euros en una tienda de mascotas de mi barrio.
Yo la tengo más que amortizada. En la casa de mi madre entretiene a las niñas y a la perra. Nunca un juguete dio para tanto.
La desventaja es el ruido machacón que hace. Es un ruido que atrae mucho a los perros. Lo mismo puedo decir de su color, un color naranja bastante chillón; color a zanahoria fresca.