Viva La Juicy es una fragancia que es una joya en muchos sentidos. El primero es por su frasco, que es tremendamente original. Es rectangular, con un tapón de cristal y un lazo que recuerda a la alta costura. Además incluye una especie de broche, para contribuir a esa idea de ropa de diseño.
Lo mejor de esta colonia es su excelente fijación. Te acompaña todo el día su olor en piel. Al principio parece que va a ser dulce y frutal, pero después de un ratito notas un suave olor a flores blancas, a jazmín y a gardenia que endulzan la mandarina y la fresa de las notas de salida. Y por fin te envuelven las dulces notas de fondo, la vainilla, el ámbar y el caramelo que se agarran a la piel, endulzando un agua de perfume perfecto para una velada romántica o una ocasión especial. Nunca os la recomendaría para ir a trabajar o para un día de calor pues puede hacerse pesada y es que su olor es denso y poco fresco, con lo que contribuye a una sensación de agobio si tenemos mucho calor.
Aunque su olor me gusta ya os digo que es una fragancia de las que yo llamo cabezona, es decir, que si hace mucho calor o el día está pesado, puede resultar demasiado intensa y dulce, tanto que podría levantaros dolor de cabeza. Y encima como fija tanto, tendréis que aguantarlo todo el día. Por tanto, Viva la Juicy es un agua de perfume frutal floral para usar en invierno o en las noches ya fresquitas del otoño, nunca para cuando hace calor.
El precio me parece excesivo aun teniendo fijación, aunque como no es un aroma para usar a diario, pues podéis daros un capricho: 73 euros los 50 ml, a mí me dura todo el invierno y mas.