La Plaza de la Constitución de San Sebastián está en mitad de la parte vieja, rodeada por multitud de callejas peatonales que están plagadas de bares y restaurantes especializados en los típicos pintxos donostiarras.
Esta plaza es cuadrada, con soportales en los que encontraremos cafeterías y bares. Sólo la he visitado de noche, en un fin de semana de noviembre y estaba bastante animada, aunque seguro que en pleno verano está repleta.
A pesar de ser cuadrada, antes se utilizaba como plaza de todos y todos los balcones de la plaza siguen numerados, porque se usaban como palco, algo que le da un aspecto muy curioso y es que si no fuera por ello no hay detalle destacable, y es que parece como una mini plaza mayor de cualquier ciudad.
Sin duda lo más importante de la plaza es su ubicación y es que visitar la parte vieja de San Sebastián es imprescindible, así que nada os costará dejaros caer por la plaza y tomaros algo en alguno de sus bares.
Lo más difícil es aparcar cerca. Os recomiendo que uséis el transporte público, aunque toda la zona es peatonal, os tocará andar 5 minutos, pero siempre por unas callejas muy interesantes y llenas de gente, sobre todo a la hora del tapeo.