No ha cambiado la Laca Elnett. Mi madre lleva años utilizándola y sigue siendo igual de mala. Incluso me parece peor. Me la use el otro día que hacía un montón de viento y me dejo el pelo apelmazado y sucio. Lamenté haberle hecho caso a mi progenitora. Mi madre cree que todo se soluciona con una pasada de laca.
La venden en frascos de 400 ml con spray. Es el frasco de laca de toda la vida. Cierra con un tapón blanco y el cuerpo de la botella de metal es de color dorado. Lo único bonito que tiene es un dibujo de una chica con una media melena airosa. A mí no me deja así el cabello. Me queda de pena. Tampoco se lo deja mejor a mi madre, aunque a ella parece que no se lo apelmaza tanto.
No es barata. El frasco de 400 ml cuesta 6,25 euros, y no sueles encontrarla de oferta. No creo que la vendan mucho, pero no le rebajan el precio. Ni siquiera te la ponen con una segunda unidad a mitad de precio.
Esta Laca Elnett no es de las mejores ni de las peores. Las conozco todavía más malas. Las lacas no son nada buenas para el pelo. Es mejor no abusar de su uso. Te acaba debilitando el cabello. Mi madre no la está poniendo tanto como la ponía cuando yo era pequeña. Tampoco se llevan ahora los peinados tan sofisticados que llevaban las señoras hace años.
No os la recomiendo. Si no tienes otra y eres de usar laca, puedes comprarla, pero, como te decía, hay lacas más suaves. Esta Laca Elnett hasta tiene un olor fuerte. Mi madre dice que huele a peluquería de marujas desocupadas e infelices. No le falta razón. Recuerda mucho el olor de las peluquerías de barrio de hace décadas. A mí me lleva a un olor de mi infancia.