Me encanta el Elizabeth Arden White tea, un perfume que no pensé que me iba a gustar tanto cuando lo saqué del papel de regalo. Fue un regalo de mi hermana. Quería sorprenderme con la nueva fragancia de Elisabeth Arden y lo consiguió.
El frasco es rompedor, blanco, con forma de frasco de laca. No parece una botella de fragancia. Mi madre cuando viene a mi casa siempre lo confunde con la botella de la laca.
Es un perfume que va muy bien para mujeres de más de 25 años. Aunque es juvenil, no lo es tanto como para que lo use una adolescente. Tiene un toque chic serio. Esto no quiere decir que no lo puedas llevar durante todo el día. Yo lo hago. Le encuentro un olor muy de verano.
Las notas de salida de esta nueva fragancia son mandarina, esclarea, helecho y notas marinas, que dan paso a un corazón a base de té blanco, yerba mate, rosa turca e iris blanco. En la base, las notas de fondo están formadas por ámbar, almizcle ambreta, haba tonka y maderas exóticas, que dejan un halo de fragancia característico pero muy suave, tan suave que lo hacen ideal para bajar a la playa sin dar la nota de estar fuera de sitio.
Os lo recomiendo. Yo me lo estoy poniendo una barbaridad. Mi hermana estuvo muy acertada con su regalo. No gastó mucho. El frasco de 100 ml que me regaló cuesta poco más de 32 euros. Es un perfume que está muy bien de precio. Lo venden también en frascos de 50 ml y de 3 ml.