Tuvimos la gran suerte de ser de los primeros huéspedes del Hotel Riazor tras su reforma. No parece el mismo hotel. Es un hotel de cuatro estrellas a pie de la maravillosa playa de Riazor que merece 5 estrellas. Lo dejaron divino.
A nosotros nos dieron una habitación en la planta nueve. Teníamos unas vistas estupendas de la playa, del mar, del cielo, de las gaviotas. Yo me hubiera quedado a vivir en aquella habitación. Estaba tan feliz que convencí a mi chico para quedarnos tres días más. No me importó que lloviera. A mi me gusta La Coruña con sol, con lluvia y nublada. La Coruña es una de las ciudades más bonitas del mundo mundial. Y el Hotel Riazor está a la altura de los mejores hoteles tras su remodelación. Por eso os lo recomiendo.
Es un hotel con una ubicación fantástica. Sales del hotel, cruzas la calle y estás en la playa. Cuando estuvimos nosotros celebraban el San Juan. Había una marcha en la playa de noche que no te puedes imaginar. A las doce hubo un concierto. Mi marido y yo vivimos uno de los fines de semana más felices de nuestras vidas.
El hotel está muy limpio y las camareras de piso son muy amables. Se las ve contentas. No son de esas kellys que te miran con mala cara y se ven cansadas de su trabajo. Eran unas chicas alegres, simpáticas, que te preguntaban si podían limpiar la habitación o venían más tarde. Unos encantos. Lo mismo puedo decir del personal de recepción.
Me gustó la decoración del hotel en colores blancos cálidos y grises amarronados. Los suelos eran de tarima de madera, las camas grandes y cómodas. El cuarto de baño también me gustó. Tenía una bañera moderna, una pileta funcional y bonita.
Espero volver al Hotel Riazor en La Coruña. Esta vez llevaré a las niñas. Lo bueno hay que compartirlo con las personas que más quieres. Quiero a mi marido, pero no puedo vivir sin mis hijas, mis dos tesoros. Por eso quiero que disfruten conmigo el nuevo Hotel Riazor, el hotel, donde hace muchos años, mis padres quitaron su foto de recién casados en la famosa escalera.