Meixigo en Cambre, A Coruña, es una pequeña localidad que va perdiendo habitantes año a año. Está en plena naturaleza, con sus casas diseminadas en seis lugares, apenas servicio de autobús público y con una iglesia característica del interior de Galicia.
Cuando vas recorriendo pueblos haciendo senderismo tienes la sensación de que todas las iglesias son iguales. La iglesia de Meixigo la has visto ya, con su torre y campana, fachada de blanco despintado y piedra a la cara vista ribeteando. La Santa Madre Iglesia ha esparcido fotocopias de templos en honor a un Dios único.
Llego a Meixigo con mi hermana a quien últimamente se le ha dado por hacerse senderista. Dice mi suegra que ha sido ella la culpable. Mi marido opina que fue el médico de cabecera el responsable de esta afición al senderismo de toda la familia. Andar es sano. El doctor nos ha convencido, y todos nos hemos lanzado a la lucha contra el colesterol visitando lugares tan apartados del mundanal ruido como Meixigo.
En sus caminos encontramos a algunas personas mayores, casi todas mujeres, practicando el paseo rápido. Nos saludamos con un buenos días y seguimos quemando calorías andando por caminos que han sido asfaltados sin sumarle anchura y olvidándose de ponerles aceras.
En los últimos años, el ayuntamiento de Cambre se acuerda mucho de este pueblo. Les han habilitado zonas comunes de esparcimiento. Cuando estuvimos nosotros por allí, habían plantado una serie de árboles que financió el concello. Tenían varios castaños y algún árbol frutal, lo que me pareció una buena idea. La fruta es muy cara y, si la puedes pillar gratis, e un dinerito que te ahorras.
Os recomiendo visitar Meixigo. Es una localidad del ayuntamiento de Cambre en La Coruña que conserva todo el encanto de un entorno rural lleno de verdor en cualquier época del año.
Pero si buscas diversión, Meixigo no es tu sitio. Encontramos solo un bar de aldea. La gente muy amable, pero nosotros estamos acostumbrados a pueblos con más vidilla.