Patas arriba, de Eduardo Galeano
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jmll1964
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Acerca de:Patas arriba. La escuela del mundo al revés [Eduardo Galeano]
Ventajas:Nuestras sociedades tal como son
Desventajas:Si no se comparte su visión
Hola amigos de Xakia:
"Patas arriba-La escuela del mundo al revés" es un libro escrito por el periodista y escritor uruguayo Eduardo Galeano. Nacido en Montevideo en 1940, trabajó en la prensa uruguaya hasta que tuvo que exiliarse a causa del golpe de Estado militar de 1973. Vivió en Argentina y después en España hasta que regresó a su país en 1985. Desde entonces se dedicó preferentemente a la actividad literaria. Ha publicado varios títulos, siendo el más destacado el primero, publicado en 1971, "Las venas abiertas de América Latina". Posteriormente tiene otros títulos entre los que destacan la trilogía "Memoria del fuego", escrita entre 1982 y 1986, y el libro del que voy a escribir en esta opinión, "Patas arriba-La escuela del mundo al revés", escrito en 1998.
La temática más recurrente en sus obras es la de América Latina, la historia de colonialismo y explotación de sus pueblos y el presente de sus sociedades injustas, radicalmente desiguales y llenas de violencia y explotación. Y en este libro Galeano básicamente no se aparta de este guión, pero yendo más a los conceptos generales para a partir de ellos mostrarnos una prolija exposición de muestras y ejemplos de la vida real que se ajustan a esos patrones, contrarios a los que deberían ser unos principios éticos que rigieran nuestras sociedades. Un mundo donde triunfan el racismo o el machismo, donde para hacer negocio llega a fomentar el miedo, e incluso se crean enemigos a medida, donde la impunidad de los poderosos contrasta con el castigo a los débiles, donde la sociedad de consumo hace que solo tiene valor quien consume y millones de personas sobran, además de ser totalmente insostenible para el planeta, donde los trabajadores del sur ( y del este) del mundo emigran al norte para tratar de sobrevivir y los empresarios del norte trasladan sus centros de producción al sur (y al este) para incrementar su tasa de ganancias. El libro, como todos los suyos, es abrumador en proporcionar información al lector, nos cuenta infinidad de sucesos, hechos, declaraciones, noticias de prensa, informes, citas de otros autores, todo ello para que el lector reflexione sobre hasta que punto todo se ha dado la vuelta, se ha vuelto patas arriba y se ha puesto al revés: los valores positivos son la excepción, por desgracia. En suma un cúmulo de barbaridades totalmente enfrentadas a la sensatez y al sentido común, que como es bien sabido, es el menos común de los sentidos.
Como es patente en toda la obra de Eduardo Galeano, el autor no es neutral en absoluto ni intenta serlo, ya que para él la neutralidad es un concepto hipócrita y falso, sino que es deliberadamente parcial, se posiciona desde una postura clara de izquierda de manera abierta e inequívoca en contra no sólo de la globalización neoliberal sino del sistema capitalista como tal, y de sus aberrantes consecuencias para el planeta y para los que lo habitamos.
Este libro, cuya lectura recomiendo total y absolutamente, trata, en suma de que nos acerquemos y conozcamos más en profundidad la realidad que padecen cientos de millones de seres humanos de América Latina y el resto del mundo, incluso que seamos capaces de empatizar con ellos y así reflexionar sobre esta forma de vida del capitalismo neoliberal que tanta desgracia provoca en las grandes mayorías. Y que no pensemos que estamos a salvo, que la minoría de explotadores no se para en barras a la hora de acaparar riquezas y si ello supone empobrecer a cada vez mayores sectores no les supone ningún dilema ético. En este momento me vienen a la mente los versos del dramaturgo y poeta comunista alemán Bertolt Brecht: "Primero se llevaron a los comunistas, pero a mi no me importó porque yo no era comunista. Enseguida se llevaron a unos obreros, pero a mi no me importó porque yo tampoco era obrero. Después detuvieron a los sindicalistas, pero a mi no me importó porque yo no soy sindicalista. Luego apresaron a unos curas, pero como yo no soy religioso tampoco me importó. Ahora me llevan a mí pero ya es demasiado tarde".
Por mi parte no hay nada más que añadir.
Gracias por la atención y un saludo a todos los lectores
"Patas arriba-La escuela del mundo al revés" es un libro escrito por el periodista y escritor uruguayo Eduardo Galeano. Nacido en Montevideo en 1940, trabajó en la prensa uruguaya hasta que tuvo que exiliarse a causa del golpe de Estado militar de 1973. Vivió en Argentina y después en España hasta que regresó a su país en 1985. Desde entonces se dedicó preferentemente a la actividad literaria. Ha publicado varios títulos, siendo el más destacado el primero, publicado en 1971, "Las venas abiertas de América Latina". Posteriormente tiene otros títulos entre los que destacan la trilogía "Memoria del fuego", escrita entre 1982 y 1986, y el libro del que voy a escribir en esta opinión, "Patas arriba-La escuela del mundo al revés", escrito en 1998.
La temática más recurrente en sus obras es la de América Latina, la historia de colonialismo y explotación de sus pueblos y el presente de sus sociedades injustas, radicalmente desiguales y llenas de violencia y explotación. Y en este libro Galeano básicamente no se aparta de este guión, pero yendo más a los conceptos generales para a partir de ellos mostrarnos una prolija exposición de muestras y ejemplos de la vida real que se ajustan a esos patrones, contrarios a los que deberían ser unos principios éticos que rigieran nuestras sociedades. Un mundo donde triunfan el racismo o el machismo, donde para hacer negocio llega a fomentar el miedo, e incluso se crean enemigos a medida, donde la impunidad de los poderosos contrasta con el castigo a los débiles, donde la sociedad de consumo hace que solo tiene valor quien consume y millones de personas sobran, además de ser totalmente insostenible para el planeta, donde los trabajadores del sur ( y del este) del mundo emigran al norte para tratar de sobrevivir y los empresarios del norte trasladan sus centros de producción al sur (y al este) para incrementar su tasa de ganancias. El libro, como todos los suyos, es abrumador en proporcionar información al lector, nos cuenta infinidad de sucesos, hechos, declaraciones, noticias de prensa, informes, citas de otros autores, todo ello para que el lector reflexione sobre hasta que punto todo se ha dado la vuelta, se ha vuelto patas arriba y se ha puesto al revés: los valores positivos son la excepción, por desgracia. En suma un cúmulo de barbaridades totalmente enfrentadas a la sensatez y al sentido común, que como es bien sabido, es el menos común de los sentidos.
Como es patente en toda la obra de Eduardo Galeano, el autor no es neutral en absoluto ni intenta serlo, ya que para él la neutralidad es un concepto hipócrita y falso, sino que es deliberadamente parcial, se posiciona desde una postura clara de izquierda de manera abierta e inequívoca en contra no sólo de la globalización neoliberal sino del sistema capitalista como tal, y de sus aberrantes consecuencias para el planeta y para los que lo habitamos.
Este libro, cuya lectura recomiendo total y absolutamente, trata, en suma de que nos acerquemos y conozcamos más en profundidad la realidad que padecen cientos de millones de seres humanos de América Latina y el resto del mundo, incluso que seamos capaces de empatizar con ellos y así reflexionar sobre esta forma de vida del capitalismo neoliberal que tanta desgracia provoca en las grandes mayorías. Y que no pensemos que estamos a salvo, que la minoría de explotadores no se para en barras a la hora de acaparar riquezas y si ello supone empobrecer a cada vez mayores sectores no les supone ningún dilema ético. En este momento me vienen a la mente los versos del dramaturgo y poeta comunista alemán Bertolt Brecht: "Primero se llevaron a los comunistas, pero a mi no me importó porque yo no era comunista. Enseguida se llevaron a unos obreros, pero a mi no me importó porque yo tampoco era obrero. Después detuvieron a los sindicalistas, pero a mi no me importó porque yo no soy sindicalista. Luego apresaron a unos curas, pero como yo no soy religioso tampoco me importó. Ahora me llevan a mí pero ya es demasiado tarde".
Por mi parte no hay nada más que añadir.
Gracias por la atención y un saludo a todos los lectores
Fecha:14:08:30 15/05/11
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Categorías:Ocio y cultura
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